Para muchos, la Selección Argentina es la regalona tanto de la FIFA como de la Conmebol. Un cúmulo de acontecimientos recientes (Qatar 2022 y Copa América 2024, por ejemplo) dan cuenta de que tanto en Zúrich como en Asunción, se derriten por lo que hagan Lionel Messi y compañía.
Pero, en estos momentos, el fútbol trasandino afronta una situación que ni toda la predilección del mundo podría dar vuelta y que tiene al presidente de la nación, Javier Milei, como protagonista.
La FIFA podría castigar con dureza al fútbol argentino, por intervención de Javier Milei
El excéntrico “líder libertario” tiene entre sus obsesiones el obligar a los clubes afiliados a la AFA a transformarse en sociedades anónimas deportivas y, para ello, forzaría una modificación de los estatutos de la Asociación.
La FIFA, ante eso, es inflexible: cualquier injerencia gubernamental en los asuntos internos de una federación miembro (en este caso, que un ente externo modifique los estatutos) se sanciona, incluso, con la desafiliación. Es decir, que todos los estamentos de esa federación, incluida la Selección Argentina en este caso, quedarían vetadas de todos los torneos que estén bajo el alero de FIFA.
Ha pasado en años anteriores. Nigeria, Camerún o Grecia, escuadras mundialistas, fueron desafiliadas provionalmente por la FIFA debido a injerencia gubernamental en asuntos internos.
Las averiguaciones de la AFA y las contundentes respuestas de FIFA
A sabiendas de que el ente rector del fútbol mundial no acepta que organismos externos al fútbol se metan en asuntos que le son propios a la actividad, la AFA preguntó en Zúrich qué repercusiones tendría si es que Javier Milei insistía en su plan de modificar estatutos.
La respuesta de FIFA fue contundente: a través del director legal y de cumplimiento del organismo, el español Emilio García Silvero, la entidad contesto que “las federaciones miembros de la FIFA – y en este caso la AFA – deben gozar de la autonomía suficiente para determinar de manera libre y democrática la naturaleza jurídica de los clubes que participen en sus competiciones nacionales”.
Asimismo, desde la Conmebol reforzaron la idea de la injerencia externa. “A nuestro criterio, establecer la obligación de incluir a los clubes que se transforman en sociedades anónimas como miembros de la AFA constituye una flagrante intromisión y una injerencia arbitraria por parte del Estado”, dijeron en Asunción.
Claro está entonces el tema: o Javier Milei se olvida de meter las narices en los asuntos de la AFA o Argentina pasará de ser la regalona de la FIFA a una paria más y hasta desafiliada...
