Quincy Promes vive días complicados en Países Bajos tras ser acusado de importar 1.300 kilos de cocaína, que fueron interceptados en el aeropuerto de Amberes (Bélgica) en 2020, cuando el jugador aún pertenecía a las filas del Ajax.
De acuerdo a lo informado por la fiscalía neerlandesa, el futbolista que hoy milita en el Spartak de Moscú está involucrado en una red de narcotráfico que envió dos cargamentos, uno de 650 kilos y otro de 713 kilos, a territorio belga.
Pero eso no es todo, ya que anteriormente a Quincy Promes le reabrieron otra investigación penal por “asalto grave” en junio de 2020. Esto se debe a una puñalada que le propinó el jugador a su primo en una junta familiar. Al principio se pensaba que podría ser un intento de asesinato, pero las faltas de pruebas lo desestimaron.
Este último hecho fue negado en diferentes ocasiones por el ex seleccionado de Países Bajos, pero de acuerdo a lo recabado por la fiscalía local a través de llamadas telefónicas intervenidas, el futbolista sí tiene culpa y deberá asumir la responsabilidad ante la justicia.
El juicio en Países Bajos que le espera a Quincy Promes
Ahora Quincy Promes deberá esperar la audiencia preliminar que tendrá lugar el próximo lunes 5 de junio en Países Bajos. La resolución podría tener varias consecuencias negativas para el jugador, que viene de ser titular en el partido del Spartak de Moscú contra el Nizhni Novgorod del paso domingo por la Liga Premier de Rusia.
