Independiente de Avellaneda, uno de los 5 clubes grandes de Argentina, atraviesa por un delicado momento institucional y deportivo. En la cancha, el elenco rojo acumula ocho partidos consecutivos sin ganar, se ubica en el puesto 25 de 28 equipos en la liga y apenas ha cosechado una victoria en diez fechas.
Mientras, en el departamento de finanzas, el equipo que más veces ha ganado la Copa Libertadores acumula millonarias deudas, las que no se han podido saldar con venta de jugadores ni estrategias de mercadotecnia.
La delicada situación también ha causado la ira de los fanáticos más radicales del club, quienes el fin de semana aparecieron en las canchas de entrenamiento del club para proferir amenazas hacia todos los integrantes de la institución: “ganen o mueran”, se podía leer en los carteles que portaban los barrabravas.
Escenario insostenible para el presidente del club, Fabián Doman, quien en horas de la tarde de este martes presentó su renuncia al club, en un comunicado publicado en redes sociales.
“La crisis económica es mucho más profunda”
El ahora ex timonel de los de Avellaneda, expresó en su publicación que “entiendo que la crisis económica de Independiente es mucho más profunda y seria. No se da vuelta solo con victorias deportivas. Es evidente que no se han encontrado las herramientas para ayudar a Independiente, razón por la cual presento mi renuncia a la presidencia del club”.
Doman profundizó en que “en el plano deportivo, siempre hay tres escenarios: el mejor, el regular y el malo. Se dio el tercero. ¿Responsables? Todos. Sería muy fácil endilgarles la culpa a todo el plantel profesional. No lo voy a hacer”.
Independiente de Avellaneda es el “Rey de Copas” del fútbol sudamericano. Ha ganado siete Libertadores, más que cualquier otro equipo en el continente, además de dos Intercontinentales, que le dan además el rótulo de campeón mundial. Hasta la temporada 2013, era junto con Boca Juniors y River Plate el único cuadro argentino que jamás había perdido la categoría en el profesionalismo... Hoy, el panorama se ve muy oscuro.