“Yo era hincha de la U y jugaba por Cobresal, pero hay que asumir que ese día el arbitraje...”

Universidad de Chile y Cobresal es un duelo que cuenta con episodios históricos para el fútbol chileno. Los azules sufrieron ante los mineros el único descenso de su historia, y además, festejaron uno de sus títulos más recordados en 1994.

Este fin de semana ambas escuadras chocan nuevamente, y en conversación con En Cancha, el exdelantero César Díaz revivió otro cara a cara que despertó polémica entre la U y los Legionarios durante la semifinal del Clausura 2005.

La tarde del 14 de diciembre de 2005, Universidad de Chile y Cobresal se enfrentaban por el partido de vuelta de las semifinales del Torneo Clausura. En la ida, los nortinos ganaron por 2-1 y necesitaban solo un empate en el Nacional para llegar a la final ante la UC.

Dos penales polémicos sancionados por Enrique Osses y dos goles en los minutos finales terminaron sentenciando la llave a favor de los laicos. César Díaz, quien anotó el empate parcial para Cobresal, recordó esa serie.

“Estuvimos a 10 minutos de jugar con Católica. Perdimos 4-2, en una semifinal en la que tuvimos muchos problemas externos, hay que que asumir que ese día el arbitraje no estuvo bien, hubo una polémica grande y lamentablemente no pudimos llegar a la final”, admitió.

Para Díaz el problema era doble, y es que se enfrentaba al club de sus amores. “Siempre fui de la U, pero cuando defendía a otros equipos me olvidaba. En ese momento me preocupaba de ser profesional, y ya después el lunes veía los goles, me ponía al tanto del momento del club, pero al jugar no me importaba”, asumió.

“En ese momento me debía a Cobresal, defendía mi camiseta, el trabajo que hacíamos en la semana con mis compañeros, y el mío también”, complementó.

Al mismo tiempo, el delantero que marcó más de 150 goles en su carrera, reconoció que la mayor deuda de su carrera fue no jugar en la U. “Esa es la gran espina clavada de mi carrera, no haber podido llegar al club del que fui hincha toda mi vida”, asumió.

De hecho, confesó que pese a su pasión, siempre que pudo festejó ante los universitarios. “Es el equipo al que más goles le hice en mi carrera. Con todas las camisetas que vestí me tocó marcar. Así es la vida”, cerró.