Gonzalo Espinoza se transformó en uno de los referentes al interior del camarín de Universidad de Chile durante su periodo en el club. El Bulldog fue un jugador muy querido para los hinchas, pero dejó el club por la puerta de atrás. A partir de ahí, no ha logrado asentarse en ningún equipo.
A sus 34 años, Espinoza fue presentado este martes en Deportes Recoleta. El equipo de la Primera B será su cuarto equipo en cuatro años, reflejando lo difícil que ha sido para el mediocampista lograr estabilidad en las últimas temporadas.
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La compleja salida de la U
Espinoza retornó en 2018 a Universidad de Chile desde Turquía. A sus espaldas, el volante tenía dos títulos del Campeonato Nacional con la camiseta del Romántico Viajero, siempre como titular y figura del equipo.
En su retorno, debido a la trayectoria que tenía en el club, rápidamente tomó el sitial de líder del camarín. Su actitud muchas veces fue elogiada, lo que le permitió ser tachado en varias ocasiones como “clasiquero”, en parte por sus goles ante Colo Colo en 2019 y 2020, pero también por su entrega en este tipo de partidos.
Al parecer el chicle se estiró más de lo debido, y es que lo que era una relación de amor entre el hincha y Espinoza, rápidamente se fue degradando con las malas campañas del club entre las temporadas 2019 y 2021, donde los laicos convivieron de cerca con el descenso.
En la última fecha del 2021, cuando Universidad de Chile se salvó de forma agónica ante Unión La Calera, Espinoza rompió en llanto. El mediocampista fue uno de los jugadores más criticados de esa campaña.
Al día después, el gerente deportivo Luis Roggiero le pasó su finiquito comunicándole que ya no seguiría en la U. A partir de ahí, la carrera de Espinoza pasa por un momento complicado.
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Los años de travesía de Gonzalo Espinoza
Tras dejar Universidad de Chile, Gonzalo Espinoza fue presentado como refuerzo estrella en Unión Española. Aunque comenzó como titular indiscutido, lentamente se vio involucrado en polémicas que lo sacaron incluso de las citaciones en Independencia.
En 2023, optó por volver a Unión San Felipe, elenco de la Primera B. Aunque la idea era retomar el nivel, tampoco pudo disipar las dudas en el Aconcagua, donde alternó entre la titularidad y la suplencia.
En la búsqueda de oportunidades llegó hasta Deportes Antofagasta, elenco que defendió durante este 2024. En los Pumas atravesó quizás el momento más delicado, y es que su familia fue amenazada por barras bravas del equipo acusando mal rendimiento y poco compromiso por parte del volante.
La tensa situación obligó a Espinoza a buscar nuevos rumbos. Este 2024 defenderá la camiseta de Deportes Recoleta, elenco que busca dar la sorpresa en la Primera B y ascender. Por su parte, el Bulldog quiere volver a ser un perro de presa y tener una última oportunidad en la categoría de honor del fútbol chileno.
