Universidad de Chile finalmente no podrá tener su tan ansiado regreso al Estadio Nacional, debido a la bullada y polémica suspensión del compromiso de la primera fecha del Campeonato Nacional ante Cobresal.
Las consecuencias de la suspensión para la U son varias y una de ellas es desde lo económico. Era tanto el fervor de los hinchas de ver nuevamente a su equipo en el Nacional, que ya estaban todos los tickets agotados.
De las 32.000 entradas autorizadas en este entonces por la autoridades correspondientes, no quedaba ninguna en el sistema Puntoticket. Es decir, se iba a jugar a “estadio lleno”, situación que le iba a provocar grandes ganancias a Azul Azul.
Incluso, desde la regencia universitaria tenían presupuestado ganancias que se acercan a los 500 millones de pesos, monto que seguramente no podrá ingresar a las arcas universitarias por el fallido duelo ante los Mineros.
La U iniciará el proceso de reembolso
Michael Clark, presidente de Azul Azul, se refirió a la pérdida económica que provocó y señaló que “más de lo que se pierde, que podemos entrar en eso, lo que está pasando es desconcertante. En pos de que el partido se jugara, accedimos a todos los requerimientos. El partido del domingo habría sido el partido con más seguridad en la historia de este país, a un costo gigantesco”.
Cabe señalar que en los próximos días, el club deberá informar cómo y cuándo se iniciará el proceso de reembolso de las entradas, ya que probablemente el compromiso no se juegue en el corto plazo debido al apretado calendario que tiene Cobresal.
Por ende, es más que probable que los 500 millones que tenía presupuestado ganar la dirigencia estudiantil ante Cobresal no entren a las arcas. Todo esto si es que los hinchas deciden pedir la respectivo devolución del dinero.