La U tiene nuevo director técnico para afrontar la temporada 2024 del Fútbol Chileno, un año en que los Azules querrán, de una buena vez, dejar atrás todos los sinsabores de los últimos tiempos e ir por algo importante. Para ello, quién más idóneo que el DT del actual monarca de Chile, el ex Huachipato Gustavo Álvarez.
Luego de un tira y afloja que duró bastante poco, ambas partes llegaron a un acuerdo para que el entrenador deje la Usina y viaje a Santiago para hacerse cargo de Universidad de Chile. Todo llegó a buen puerto una vez que Azul Azul pagó la cláusula de salida del DT, de unos 200 mil dólares (unos 178 millones de pesos).
Una vez más, entonces, y como ha sido habitual en los últimos años, desde el CDA sale una cantidad importante de dinero con destino a la Octava Región, para engrosar las arcas de Huachipato. No es un hecho aislado, pues según detalla el Diario El Mercurio, desde que Victoriano Cerda está a cargo del conjunto negriazul, en 2014, la U le ha pagado más de 5 millones de dólares al cuadro Acerero.
Han sido transacciones bulladas en el mercado de pases chileno. Un ejemplo clásico es lo ocurrido en 2018, cuando los laicos cancelaron 1,5 millones de la moneda estadounidense para asegurar el préstamo del venezolano Yeferson Soteldo. Una operación que no le traje rédito alguno a Azul Azul, pues no compraron el pase, el jugador se fue a Brasil y el actual campeón de Chile recibió los 3 millones de parte del Santos.
En 2019, en tanto, Jimmy Martínez llegó a La Cisterna por un millón de dólares (50 por ciento del pase) y el panameño Gabriel Torres lo hizo por 1,1 millones. También, la U canceló la mitad del pase de Nicolás Ramírez, por 200 mil dólares.
2022 fue un año muy fructífero en las transferencias entre Huachipato y Universidad de Chile, pues a Santiago se vinieron Ignacio Tapia (800 mil dólares por la mitad del pase), Israel Poblete (630 mil dólares, contrato por cuatro temporadas) y el portero Martín Parra (préstamo, sin costo adicional) llegaron al CDA.
La operación por Gustavo Álvarez
Ahora, la llegada de Gustavo Álvarez a la dirección técnica suma nuevos dólares a las arcas Acereras. En un principio, la salida del DT, supuestamente, costaría 800 mil, pero tras cortas y por lo visto sencillas negociaciones, el pago bajó a 200 mil.
El análisis también arroja cómo han sido las transacciones hacia la otra vereda y, en ese escenario, los de la Octava Región han desembolsado apenas unos 600 mil dólares, desglosados en los 200 mil por la otra mitad del pase de Nicolás Ramírez y 400 mil por la ficha del delantero Juan Ignacio Duma.