Este martes, Ronnie Fernández vivió una jornada soñada en La Paz. El delantero de Bolívar marcó un doblete (con golazo incluído) ante el Athletico Paranaense de Arturo Vidal y encaminó la clasificación de su equipo a los cuartos de final de la Copa Libertadores.
Su actuación hizo estallar a los hinchas de Universidad de Chile, quienes divididos hicieron juicio de la etapa del futbolista por el Centro Deportivo Azul. El atacante formado en Santiago Wanderers no dejó a nadie indiferente tras vestir la camiseta azul y algunos lo defienden mientras otros lo recriminan.
Lo cierto es que, al menos en términos de efectividad, en la U solo marcó cinco goles, mientras que ahora cosecha 16 anotaciones en apenas ocho meses, demostrando que su presente en Bolivia es mucho más letal que durante su epoca en los universitarios.
El caso de Ronnie Fernández es similar al de varios jugadores que pasaron por la tienda estudiantil sin pena ni gloria, para luego mostrar un alza importante de su rendimiento en otras latitudes.
Los jugadores que la rompieron fuera de la U
Uno de los que recientemente saltó a la palestra es Valentín Castellanos. El mendocino llegó como un juvenil al cuadro universitario y solo disputó unos minutos por Copa Sudamericana ante Corinthians en 2017. Tras ello saltó a préstamo al Montevideo City Torque, que posteriormente le compró el pase que quedó en poder del City Group.
Luego de exitosos pasos, primero por el New York City y luego el Girona, saltó a la Lazio, que desembolsó 15 millones de dólares por su pase. El delantero incluso ha sido postulado a la Selección Argentina, aunque también puede jugar por La Roja, ya que su padre tiene ciudadanía chilena.
Otro caso memorable es el del panameño Gabriel Torres, delantero que llegó a la U como refuerzo estrella luego de un destacado periplo por Huachipato. Pese a ello, su paso por los estudiantiles fue un fracaso, y terminó partiendo seis meses después.
Los azules lo cedieron a Independiente del Valle, donde rápidamente se ganó un puesto como titular y fue figura en la obtención de la Copa Sudamericana en 2019 con los ecuatorianos. Luego, siguió marcando una cifra de goles considerable que le valieron partir al fútbol mexicano.
Otro caso notable es Rodrigo Ureña. El mediocampista fue una apuesta importante de Universidad de Chile quien lo compró cuando era un juvenil en Unión Española, y le entregó minutos esporádicos en el equipo.
Luego fue enviado a préstamo, donde fue figura en la histórica campaña de Cobresal en 2015, lo que cautivó a los estudiantiles que lo llamaron de regreso. Su segundo ciclo fue más de lo mismo y el mediocampista terminó siendo vendido definitivamente.
De ahí en más, el volante comenzó a hacer su camino fuera del CDA. Tras pasos por diferentes equipos del Campeonato Nacional, saltó al América de Cali, Deportes Tolima y actualmente Universitario de Lima, dejando en todos una muy grata sensación.