La U lo vendió cuando era la “joya” del fútbol chileno y hoy vive un calvario

En marzo de 2023, Ángelo Araos sufrió una grave lesión que lo marginará por el resto de la temporada. En tanto, su equipo sigue contratando jugadores en su posición, lo que complica su futuro en el extranjero.

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Universidad de Chile ha gozado la dicha de tener distintos talentos jóvenes en sus planteles durante el último tiempo, lo que ha despertado interés del extranjero. Antes de las irrupciones de Darío Osorio y Lucas Assadi, los azules tuvieron entre sus filas a un fichaje que arribó sin ruido y terminó emigrando fuera del país por sus grandes temporadas. Sin embargo, hoy vive un calvario.

Luego de su lesión en marzo de 2023, Ángelo Araos tiene un complejo futuro en Atlético Goianiense. El volante de 26 años no podrá volver a jugar en el año y en caso de estar disponible en diciembre tras la rotura completa de su ligamento cruzado de la rodilla derecha, las competencias brasileñas habrán terminado, por lo que se prevé un difícil panorama hasta fin de año.

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Como si ello fuera poco, Atlético Goianiense, club que lo tiene a préstamo hasta fines de 2023 con opción de compra, sigue contratando jugadores en su posición. Durante esta semana, el conjunto brasileño fichó a Sammuel, volante que arribó proveniente desde Fortaleza y que se mantendrá hasta final de temporada en el cuadro goiano.

Ante dichas trabas para jugar, el formado en Deportes Antofagasta deberá esperar hasta el término de 2023 para definir su futuro. Su pase pertenece en iguales partes (50%) a Corinthians y Necaxa, siendo este último club el que cuenta con sus derechos federativo y que lo envió a préstamo a Atlético Goianiense con opción de compra.

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Fue una “joya” en la U

Luego de lo que fueron sus primeras tres temporadas en Antofagasta, Ángelo Araos arribó a Universidad de Chile en 2018 como “la joya del fútbol chileno” con 20 años. El mediocampista creativo respondió a las expectativas y exhibió su talento con cinco goles en 24 partidos, incluso, en Copa Libertadores. Tras su gran año en los azules y pasos por La Roja terminó emigrando a Brasil.

Jugó en Corinthians, Ponte Preta y Necaxa, pero nunca pudo ser el mismo de Universidad de Chile. A principios de 2023 volvió al fútbol brasileño con tal de enmendar su camino, pero solo alcanzo a jugar 169 minutos con Atlético Goianiense antes de sufrir su grave lesión. En la actualidad, lucha por volver a estar en una cancha, aunque sin futuro claro por el momento.

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