En la U, el plan original era tener a su nuevo entrenador hace más de una semana. Puertas adentro, la dirigencia incluso manejaba el 21 o 22 de junio como las "fechas ideales" para confirmar oficialmente al DT que reemplazaría a Rafael Dudamel. A fin de cuentas, la búsqueda por un técnico había comenzado hace meses, incluso antes de la salida del venezolano, y se había intensificado cuando era claro que un cambio en la banca era inevitable.
Sin embargo, esta mañana será nuevamente Esteban Valencia que dirija la práctica del primer equipo en el CDA, con miras a los octavos de final de Copa Chile, donde enfrentarán a Fernández Vial. El "Huevo" sigue con la chapa de interino, por más que las señales apunten que hay conformidad con su gestión y que no incomodaría que se quede en el cargo más tiempo.
Pero la verdad es que la idea era que el técnico de la Sub 16 azul no dirigiera un solo partido oficial de la U, y que solamente se hiciera cargo de mantener al plantel "activo" mientras llegaba el DT oficial, de una larga lista de nombres internacional.
Pero uno tras otro, todos los favoritos que habían sido apuntados por la dirigencia se han ido cayendo y optando por otros desafíos, mientras Valencia puede que incluso llegue a la reanudación del Torneo Nacional, tras el receso por la Copa América.
¿Qué pasó? Algo que bien se podría definir como un "autogol".
¿Por qué se le cayeron todos los candidatos a la U?
El primer candidato que surgió en la U, mucho antes que llegaran los nuevos dueños, era el colombiano Juan Carlos Osorio. Técnico mundialista con México y de prestigio internacional, hablaba a las claras de la ambición del naciente proyecto con un nombre que remecería el mercado. Hubo acercamientos preliminares con el cafetero, pero finalmente no lograron convencerlo y acordó su llegada a América de Cali.
Otro nombre que estaba al tope de la lista azul era Alexander Medina, a quien finalmente no se pudo convencer para que abandonara Talleres de Córdoba. Lo mismo que Eduardo Domínguez, otro que estaba muy bien evaluado, en Colón de Santa Fe. Y el uruguayo Diego Aguirre, quien tenía sus partidarios en la directiva, también agradeció el interés, pero decidió seguir con su carrera en Inter de Porto Alegre, donde estaba el español Miguel Ángel Ramírez, nombre casi inalcanzable económicamente.
Incluso los nombres que no estaban tan considerados al comienzo se fueron cayendo, como Pablo Marini, que se fue a Liga de Quito de Ecuador.
Según cuentas fuentes conocedoras de las negociaciones a Encancha, un gran punto que se repite una y otra vez entre los técnicos consultados es la falta de un "proyecto". Y eso tiene mucho que ver con que en la U han marchado al revés de cómo habían planificado, ya que pensaban liderar la búsqueda de un nuevo técnico con otro puesto clave ya definido: la gerencia deportiva.
Pena la falta de un gerente deportivo
La búsqueda de quien reemplazara a Sergio Vargas y Rodrigo Goldberg comenzó casi en paralelo a la del reemplazante de Dudamel como técnico, pero tampoco fructificó. Aquí, la apuesta también era alta, con el hombre clave en los éxitos internacionales de Independiente del Valle- Luis Ruggiero- como el favorito.
Pero no se le pudo sacar de Ecuador y, viendo cómo se acababa el tiempo, se decidió acelerar la gestión por el nuevo entrenador, con el gerente de las divisiones inferiores, Manuel Mayo, como gerente deportivo interino.
Y eso, de acuerdo a fuentes cercanas a algunos de los postulantes, no acomodaba demasiado porque no daba señales de un plan serio y consolidado al cual llegar. Y ante eso, simplemente decidieron considerar otras ofertas que tenían en Sudamérica, hablando a las claras de lo que codiciados que eran. "Nunca fue un tema económico", indican en el CDA, ya que no se alcanzó a hablar derechamente con ninguno sobre sus aspiraciones financieras.
Ahora, los únicos en carpeta son los que desde el comienzo estuvieron disponibles, pero que en la lista de candidatos aparecían al final: el argentino Gustavo Costas y Francisco "Paqui" Meneghini, que nunca fueron prioridades. Y ahora el uruguayo Pablo Ripetto, quien viene de quedar libre de la LDU de Quito, pero que también tiene otras chances en el continente, por lo que no se descarta que vuelva a pasar lo mismo que con los anteriores.