La eliminación de Universidad de Chile ante San Lorenzo de Almagro por Copa Libertadores estuvo marcada por las numerosas bajas por Covid que presentó el plantel azul, lo que le impidió contar con, al menos, diez jugadores en el duelo de revancha, además de los tres que se ausentaron en la ida, razón por lo que en la U están realizando una investigación interna.
Desde el elenco laico buscaron conocer exactamente dónde se rompieron los protocolos del club para evitar un contagio masivo, por lo que abrieron las indagatorias, las que habrían detectado la situación con la que inició el brote de coronavirus en el plantel, según lo informado en TNT Sports.
En ese sentido, el cuadro azul habría determinado que el primer caso de contagio en el plantel se habría producido en una reunión familiar del jugador, quien sin saber que tenía el virus en el cuerpo fue a entrenar en los días previos al duelo de ida ante San Lorenzo, instancia en la que tras las prácticas compartió un mate con otros futbolistas, donde se habría utilizado la misma bombilla.
Esta situación provocó que tres jugadores quedaran fuera del primer compromiso contra los argentinos, mientras que en la revancha jugada en Buenos Aires, la U tuvo que hacer debutar a dos juveniles y además echar manos a otros valores de la cantera universitaria para armar el plantel titular, debido a la decena de ausencias que tuvo el equipo.
Si se toman medidas disciplinarias por la situación, aún está siendo evaluado por la regencia azul, aunque lo concreto es que el brote de Covid mermó al equipo en la llave contra los "Gauchos de Boedo", donde los azules se jugaban gran parte de sus aspiraciones del año, ya que al quedar eliminado en fase 2 de Copa Libertadores, solo tendrán competencias locales durante el resto del 2021.