Ramiro González jugó un año y medio en Unión Española, entre mediados de 2017 y todo el 2018, dejando una muy buena impresión como defensa central. Partió a México, donde estuvo tres temporadas, pero hace una semana que está libre, luego que el club León decidiera no renovarle su contrato. Algo que en la U recibieron con mucha atención.
González es alguien que está en la carpeta azul desde su paso por Santa Laura, una consideración que comparten tanto el gerente deportivo Luis Roggiero como el nuevo entrenador, Santiago Escobar. Además es alguien que tiene un par de "ventajas".
Por un lado, es zurdo, por lo que podría ocupar un lugar que está desierto en el plantel actual tras la salida de Ramón "Cachila" Arias y en el cual se podría complementar con el recién llegado a la zaga central, el boliviano José María Carrasco, cuya oficialización es inminente.
Por el otro, aunque es argentino, tiene doble nacionalidad ya que sus abuelos son chilenos, y no ocupa cupo de extranjero, lo que le permitiría a la U seguir buscando refuerzos en otros mercados.
Por eso Azul Azul ya le hizo llegar una oferta, aunque preliminar, según información de En Cancha. De hecho, el jugador de 31 años les respondió que estaba "muy interesado" en volver a Chile y jugar por el equipo, aunque avisó que tiene otros ofrecimientos -también de otro club chileno, entre ellos- y analizará todas sus opciones antes de tomar una decisión final.