Universidad Católica sigue trabajando en la modernización de su estadio. San Carlos de Apoquindo ya es una estructura imponente que puede verse desde prácticamente todos los ángulos, y aspira a “mimetizarse” con la precordillera, sin -en buen chileno- quedar como poroto en paila marina.
Y es que desde que la idea se comenzó a concebir nunca se pretendió ser una de estas “naves espaciales” que aterrizan y terminan transformándose en elementos completamente ajenos al paisaje, y ejemplos hay muchos. Basta ver el estadio del Tottenham en Inglaterra, el nuevo Santiago Bernabéu en España o los reductos del último Mundial de Qatar.
“Yo esto lo explicaría de dos formas. Primero, la sociedad ha cambiado y hoy en día hay una mayor conciencia por la sostenibilidad, y lo segundo es que este estadio está inmerso en un entorno bastante particular, donde hay una comunidad que está muy cerca. Entonces, por qué no un platillo volador o una de estas naves espaciales que estamos acostumbrados a ver en otros lados, justamente porque es un estadio que quiere ser respetuoso con la comunidad y su entorno. Este es un lugar único”, le cuenta a En Cancha, Juan Pablo Pereira, Managing Director de CMPC Maderas.
La famosa Papelera es la encargada de dotar de madera al estadio de la UC, que será un material fundamental en la Fortaleza de los Cruzados.
“Estamos incorporando la madera como elemento predominante para aportar calidez y nobleza al material, pero también para poner un elemento sustentable en este proyecto. Nosotros como CMPC tomamos la decisión de ir un paso más allá, y no nos quedamos solo con la madera, sino que nos comprometimos también a aportar 3.200 quillayes que están siendo parte de este proyecto, y a la fecha ya llevamos mil entregados, los cuales ya están siendo plantados”, recalca.
La madera estará visible a los ojos del hincha
“El uso de la madera en este estadio es una mezcla que abarca el ámbito acústico, el sustentable y también el arquitectónico. La idea principal de este proyecto era hacerlo amigable con el entorno, y obviamente la madera ayuda mucho con ese objetivo, y todo esto estará visible a los ojos de la gente, porque estará incorporada en la fachada del estadio, en parte de las galerías, en los techos también. La madera tiene características importantes, como por ejemplo que es cinco veces más liviana que el acero o el hormigón, y no sacrifican, necesariamente, rigidez o resistencia estructural”, sostiene Pereira.
“Además, la madera es un muy buen aislante. Siete centímetros de madera es lo mismo que un metro de hormigón, y eso ayudará mucho en la acústica del estadio. Este es un proyecto bastante completo, porque no solo modernizará un estadio, sino que todo un entorno. La comunidad está muy interesada en que esto se haga bien. Sabemos que este recinto tendrá una visibilidad increíble, no solo en Chile, sino que en América Latina, así que será un orgullo para todos”, cerró.
