Nicolás Solabarrieta, hijo del periodista deportivo Fernando Solabarrieta, anunció su sorpresivo retiro del fútbol profesional a los 27 años. Solabarrieta inició su formación en el fútbol en Universidad Católica y la última camiseta que vistió fue el Seravezza, de la Serie D de Italia
Solabarrieta, quien vistió múltiples camisetas en el fútbol chileno -entre ellas, Palestino, Deportes Recoleta y Lautaro de Buin- recordó sus inicios en el fútbol en la UC y el conflicto familiar que tuvo por este motivo, ya que su padre es un reconocido fanático de Unión Española.
“Fue un conflicto, simplemente me llamó la Católica y quedé, me fue bien y empecé a jugar. La Católica siento que como concepto de familia nos gustaba mucho, porque no solo forma jugadores, sino que también forma personas”, señaló Solabarrieta en conversación con Radio Agricultura.
El exdelantero, además, dio detalles de su llegada a Universidad Católica, donde no alcanó a debutar profesionalmente. “Empecé a jugar en la escuela de Iván Zamorano a los 10 años y en un campeonato de colegio me vio Andrés Romero y me llevó a una prueba masiva para ver si tenía las condiciones de jugar en Universidad Católica. Me fue bien y quedé en la sub-13 y ahí empezó bien fuerte la pasión. A mí una cosa que me gusta mucho de Católica es que en cada categoría uno cambiaba de entrenador y uno iba absorbiendo mucho de distintos entrenadores”, complementó.
Su futuro lejos del fútbol
Nicolás Solabarrieta anunció su retiro del fútbol profesional a temprana edad y su futuro está alejado de este deporte, ya que el exdelantero tiene claro su nuevo desafío.
“Con unos amigos lanzamos un emprendimiento que mezcla la moda con el gimnasio. Tros es una marca que combina el streetwear con entrenamiento. Sentíamos que no había una marca que nos representara”, afirmó en conversación con LUN.
Por último, el exjugador reveló los motivos que lo alejaron del fútbol profesional a los 27 años. “Retirarme fue una decisión difícil. A través de los años me pasaron un montón de cosas, pero no quiero hablar mal de nadie, lo que sí puedo decir es que mi carrera estuvo marcada un poco por el prejuicio. Se me cerraron puertas por ser yo, por ser hijo de”, sentenció.