Si no fuera por la Copa Chile, la Universidad Católica ya estaría pensando en el 2024. Sí, recién en agosto de este 2023.
Los “Cruzados” están en crisis deportiva: décimos en el Campeonato Nacional con apenas 27 unidades, fuera de toda clasificación a un certamen internacional el próximo año, y solo con vida en la Zona Centro Norte de la Copa Chile, donde deberá verse las caras en la final con Colo Colo, un rival que perfectamente puede dejarlos en el camino.
¿Culpables? Muchos, seguramente, pero en el seno del club precordillerano la tienen clara: hoy el equipo está como está por culpa, en parte, de Ariel Holan.
Ariel Holan: ¿el gran responsable de la crisis en la UC?
Así lo confidenció una fuente interna a El Mercurio. “El plantel está mal conformado. Estamos pagando el costo de haberle pasado las llaves del club a Holan”, señalan en una publicación de hoy martes.
Luego, la misma voz opinante explica por qué hay enojo con el DT argentino: “Holan era muy invasivo. Por ejemplo, no fuimos partidarios de dejar partir a Felipe Gutiérrez. Nunca fue del gusto de Holan, quien lo mandaba a entrenar aparte, en horarios distintos al plantel de honor. El jugador se aburrió. El técnico dijo que no lo quería y bueno, optamos por tomar su palabra”.
De todas maneras, con Holan ya fuera de Las Condes los problemas en la UC no cesan. Es más, de la mano de Nicolás Núñez ni siquiera se ha visto esa reacción anímica típica de un cambio de mando, y el mal juego persiste en los “Cruzados”.
Ahora la Universidad Católica deberá olvidarse de todos sus líos y enfocarse en las llaves de ida y vuelta ante Colo Colo, a quien pretenden eliminar para seguir avanzando en la Copa Chile y agarrar un cupo a la Copa Libertadores 2024.
