La victoria 3-0 de Universidad de Chile sobre Universidad Católica en el Clásico Universitario dejó en el piso al conjunto cruzado. Los de San Carlos de Apoquindo cosecharon su cuarta derrota en 10 partidos, dejando en entredicho la continuidad de Ariel Holan en la dirección técnica.
La caída frente a los azules obliga al DT argentino a clasificar en Copa Chile este fin de semana cuando enfrente a Santiago Wanderers por cuartos de final, o de lo contrario su permanencia en los precordilleranos se volvería insostenible. Sin embargo, hay un punto importante y que explica el porqué aún en la dirigencia de la UC no han tomado medidas.
El tema pasa netamente por lo económico. El adiestrador argentino finaliza contrato con la institución en diciembre del 2023 y un despido provocaría que Cruzados desembolse más de 400 millones de pesos chilenos, cifra que en el directorio de La Franja consideran excesiva, según información que entrega El Mercurio.
De acuerdo al medio citado anteriormente, un miembro de la dirigencia señaló que “tenemos un equipo sin respuestas” y que la única piedra de tope para despedir a Holan es la millonaria indemnización que tendrían que pagar.
Los refuerzos que pidió Ariel Holan para el segundo semestre
Pese a los malos resultados, por la cabeza de Ariel Holan no pasa por la cabeza dar un paso al costado y renunciar a Universidad Católica, por lo que ya prepara lo que será la segunda rueda en el Campeonato Nacional.
Para eso, el director técnico le solicitó a la dirigencia cruzada tres refuerzos para potencia el plantel: un lateral derecho para reemplazar la repentina salida de Mauricio Isla, un volante mixto que acompañe en el mediocampo a Ignacio Saavedra y un mediocampista ofensivo.
Posterior al encuentro con los Caturros programado para el domingo 2 de julio, está pactada una reunión entre el directorio de Cruzados y Ariel Holan, donde el ex Independiente tendrá que exponer y entregar un informe sobre el análisis de lo que fue un convulsionado primer semestre.