Atentos estaban hoy en San Carlos de Apoquindo a lo que pasaba en Luque, Paraguay, en el sorteo de la Copa Sudamericana, competición a la que anoche accedió la UC tras vencer a Inter de Porto Alegre. Las bolillas escogidas en la Conmebol lo emparejaron con Sol de América, un modesto equipo paraguayo que resulta desconocido para prácticamente todos los hinchas chilenos. Lo cierto es que las competiciones internacionales para el rival de los cruzados no son algo nuevo. De hecho, Sol de América ha participado seis veces en la Copa Libertadores -la última en 1992- y cinco en la Copa Sudamericana, todas de manera consecutiva, desde el 2016 a la fecha. En el plano local es considerado uno de los equipos de media tabla para abajo. Es más, sólo ha gritado campeón en dos oportunidades (1986 y 1991), y último Torneo de Apertura lo culminó en la décima posición de doce participantes, con 19 unidades, a 31 puntos del campeón Cerro Porteño. Su técnico es el histórico arquero argentino Luis Islas, campeón del mundo con Argentina en 1986, y mano derecha de Diego Armando Maradona en el Dorados de Sinaloa el 2018. En su plantel destaca un jugador que tuvo un paso por la Universidad de Chile, que amargó a los cruzados con un golazo en un Clásico Universitario jugado el 2014. Hablamos de Mathías Corujo , futbolista uruguayo que, a sus 34 años, comanda al Sol de América en la Sudamericana. La próxima semana se jugará el partido de ida en tierras paraguayas, aunque el día y la hora aún no está establecida por la Conmebol. Ya la primera semana de noviembre, la UC recibirá a los paraguayos en San Carlos de Apoquindo.