Reinaldo Sánchez se aburrió de la barra de Santiago Wanderers: “Nos tienen hasta la coronilla”

El presidente de los Caturros aseguró que para el club no es ninguna gracia jugar de local en Valparaíso: la institución pierde plata por culpa de su conflictiva barra.

Santiago Wanderers no ha podido controlar a su conflictiva barra en los últimos años. Foto: Agencia Aton.

No hay que ser mago para saber que Santiago Wanderers no la pasa bien en la Primera B, sobre todo en el aspecto deportivo. Basta con ver la Tabla de Posiciones, donde los Caturros están -luego del severo castigo a Barnechea- undécimos con 29 unidades, fuera de puestos de Liguilla de Ascenso.

Sin embargo, no es el único ítem que le hace pasar rabias a la directiva del club de Valparaíso, sobre todo a su presidente, Reinaldo Sánchez. La economía de la institución no está sana y las deudas le pegan golpes por todos lados.

Para el mandamás, el culpable de todo este problema tiene nombre y apellido: la barra de Wanderers. Sánchez asegura que el club debe desembolsar una millonaria cifra cada vez que hacen de local en el Elías Figueroa, y todo por lo que le exigen las autoridades por tener una hinchada conflictiva.

La barra de Wanderers lanzando bengalas al campo de juego en el partido ante Rangers. Foto: En Cancha.
La barra de Wanderers lanzando bengalas al campo de juego en el partido ante Rangers. Foto: En Cancha.

“La barra de Wanderers acompaña, pero origina multas y sanciones”

“Están los problemas que ocasiona la barra, que nos tienen hasta la coronilla. Eso nos significa mayores guardias, mayores rejas (...) Te exigen 80, 100 guardias, que no existían antes. Antiguamente era Carabineros quien estaba en los estadios. Se exigen vallas que entre ponerlas y sacarlas te piden 3 millones de pesos por partido”, se quejó Don Choco en conversación con El Mercurio de Valparaíso.

Tal es la magnitud de daño al tener una barra brava, que ya no es ninguna gracia ser local en Playa Ancha. “Lo único que recauda Wanderers son los 112 millones que da la televisión, porque en el estadio, con 4 mil personas, perdemos plata. Solo al IND tenemos que pagarle 3 millones 750 mil pesos por partido. En el fondo, son como 12 millones de gasto. Al final, jugar como local en Valparaíso es perder plata”, añadió el dirigente.

“La barra de Wanderers acompaña mucho al equipo y se siente, pero también originan multas y sanciones”, señaló Sánchez, antes de dar su reflexión acerca de cómo se trata a los otros equipos de Primera B que no tienen mayor convocatoria.

“La situación está difícil. Cuando salimos campeones el 2001, la televisación nos aportaba 5 millones mensuales, pero ahora las cosas son diferentes, porque en la B les dan a todos lo mismo, a Morning, Barnechea, Recoleta y Magallanes, equipos de Santiago que llevan 200 personas al estadio. Ellos ganan plata porque no tienen que pagar guardias ni nada, En cambio Wanderers, como es un equipo grande, jode”, cerró.