¿Un desprecio a Wanderers? Hijo de David Pizarro brilla como juvenil con Everton

Bastián David Pizarro Gómez está desde agosto de 2021 en la cantera del elenco "Ruletero" y ya marcó dos conquistas en el Campeonato Nacional Sub 18.

El fútbol Joven en Chile retomó su actividad ya hace dos semanas, luego de una prolongada paralización de casi dos años. En la categoría Sub 18 y Sub 21 se han visto buenos partidos, donde con sus presentaciones ya destacaron algunos jugadores.

Así es el caso de Bastián David Pizarro Gómez, quien tiene 18 años y defiende la camiseta de Everton de Viña del Mar. ¿Quién es su padre? nada más ni nada menos que David Pizarro, el emblemático volante porteño formado en Santiago Wanderers, quien en los últimos años vive un divorcio absoluto con la gran mayoría de los hinchas del Decano.

El joven jugador no ha realizado toda su carrera en el cuadro "Ruletero", pues recién en agosto de 2021 a la institución "Oro y Cielo", eterna rival de los de Valparaíso.

Y hasta el momento ha tenido destacadas presentaciones con el cuadro viñamarino. En el primer compromiso no fue citado en el empate ante Deportes Melipilla 1-1, pero sí sumó los 90 minutos en la victoria por por 6-3 frente a Unión La Calera, marcando presencia en el marcador con dos goles.

En tanto, como se nombró anteriormente, Pizarro Gómez lleva poco tiempo con los "Oro y Cielo", ya que en sus primeros años pasó por la cantera de Santiago Wanderers.

De esta forma el hijo del "Fantasista" se une al grupo de jóvenes valores que hacen sus primeras armas en divisiones menores y que tienen el vínculo de que sus padres jugaron en el profesionalismo.

Además, cabe destacar que en la cuarta fecha del certamen juvenil se vivirá una nueva edición del "clásico porteño" en la categoría, entre Everton y Santiago Wanderers.

Los desencuentros de Pizarro padre con Santiago Wanderers

Durante toda su carrera, David Pizarro declaró su amor a los cuatro vientos por Santiago Wanderers. Muchas veces, en su espectacular trayectoria por Europa lució la camiseta de los verdes en alguna celebración, tal como lo hizo cuando se coronó campeón de la Copa América 2015 con la Selección Chilena, cuando festejó con la indumentaria del club del puerto.

Por eso, cuando el "Fantasista" fue oficializado como refuerzo del club el 21 de julio de 2015, se vivió una locura en la ciudad. Incluso, el día de su presentación en el Elías Figueroa Brander, llegaron poco más de nueve mil personas, solo para ver al hijo pródigo.

Su paso, sin embargo, fue un desastre. Las lesiones le pasaron la cuenta al mediocampista y solo jugó 11 partidos entre Campeonato Nacional y Copa Chile. No marcó y no gravitó como esperaban los fanáticos, quienes igualmente, siempre lo defendieron.

Pero los primeros desencuentros comenzaron en julio del 2016. Ese día, el club caturro comunicó que el jugador presentó su renuncia. Todo esto, tras una serie de desavenencias con los dirigentes del equipo a quienes criticó por la pobre infraestructura para el tratamiento de las lesiones de los futbolistas, por ejemplo.

"Hicimos un buen campeonato y la idea es agarrarse de eso para lo que viene en el futuro, pero de nuevo estamos con la misma incertidumbre de qué es lo que va a pasar, si vamos a pelear el descenso o vamos a mantener la categoría. Hay cosas que no están bien en Valparaíso", señaló tras su primer campeonato con los verdes, quienes con Alfredo Arias pelearon el título hasta las últimas fechas.

Precisamente, sobre la sorpresiva salida del charrúa, dijo en otra fuerte crítica que "para los que llevamos muchos años en el fútbol, era esperable la forma en que iba a terminar la relación de Arias y Santiago Wanderers. Su llegada también fue compleja, sobre todo por la cláusula que se le puso en el contrato respecto a su rendimiento".

Al momento de su salida, David volvió a disparar contra los directivos. "Las ganas de que yo volviera a la institución eran mías y de la gente, de nadie más. Quería hacer grande a mi club. Fue complejo, terminé apuñalado entero", dijo.

Del amor al odio

Hasta ahí, muchos caturros seguían apoyando a quien consideraban como un ídolo. Sin embargo, todo comenzó a cambiar en enero de 2017. En el último día de ese mes, y luego de un período entrenando en el CDA, Pizarro firmó en Universidad de Chile.

El exjugador de Fiorentina y Roma, entre otros, pareció olvidar por completo a Wanderers. Nunca más habló del club ni dio razones exactas del por qué de su renuncia. La regularidad que logró en la U, sin mayores lesiones, empezó a ser tema de conversación entre los wanderinos. 

Su paso por la U, la felicidad que expresaba y su gran nivel fueron calentando el ambiente en el Puerto. Y todo explotó el 22 de abril de 2017, cuando los azules recibieron a los porteños en el Nacional y vencieron 2-0. Los cerca de 500 hinchas de Wanderers presentes en el Estadio le realizaron una serie de cánticos ofensivos. Y Pizarro los sintió, tanto, que al final del encuentro, con los porteños a sus espaldas, besó la camiseta azul en el sector de "Los de Abajo". 

Ese mismo año, en noviembre, se jugó el segundo partido del año, en Playa Ancha. El griterío en contra del exseleccionado fue ensordecedor, pero una nueva victoria azul, con Pizarro en cancha, aparecía como otra afrenta para quienes se sentían defraudados por su, a esas alturas, exídolo.

La "revancha" de los verdes, sin embargo, fue quizás más dulce que lo esperado. En Concepción, Wanderers venció por 3-1 a la U y se quedó con el título de la Copa Chile. El gol de "Pek", que llegó en los descuentos del partido, pasó desapercibido, en medio de los festejos del Decano.

Luego, nunca más hubo un enfrentamiento entre ambos. Pizarro terminó su carrera entre cánticos y homenajes de los hinchas de Universidad de Chile, donde sí sintió el cariño que el puerto se transformó en despecho, que no parece acabar y con la presencia de su primogénito jugando en el tradicional rival, solo puede aumentar.

Así fue la presentación de David Pizarro en Wanderers el 2015

Gentileza: CNN Chile