Cobreloa sigue sin entregarse, no baja los brazos, continúa luchando... Así ha estado todo el año, pero en estos dos últimos partidos que quedan en el Campeonato Nacional, debe remar con aún más fuerza, ya que el peligro de perder la categoría y volver a la Primera B es real, muy real.
Si se mira la Tabla de Posiciones, los loínos están en la decimoquinta posición con 27 unidades, y están a 3 puntos de la zona de salvación. Sin duda un fierro caliente que se animó a sostener César Bravo, adiestrador que explicó por qué puso en juego su carrera cuando una caída por el abismo parece algo tan cercano.
César Bravo: “A Cobreloa nunca le podría decir que no”
“Me produce emoción estar acá, es mi club, donde yo nací, donde me forjé. Tuve altos y bajos, pero era difícil decirle que no a Cobreloa. Soy hincha con toda mi familia, mi hijo, mi nieto. A Cobreloa nunca le podría decir que no, independiente del momento complejo”, señaló el DT en conversación con Radio Futuro.
“Con nuestra llegada creo que le hemos dado otro aire, pese a que el último resultado no fue el óptimo. Esperemos lograr el objetivo de quedarnos en Primera”, añadió.
Respecto a qué tipo de plantel se encontró, tiró: “Hay muchas situaciones que han golpeado a la institución, cosas extrafutbolísticas. Este plantel está golpeado, y más con la salida de Dalcio, que tenía un gran cariño de los jugadores. Pero se han seguido entregando al máximo, dándolo todo en los entrenamientos. Están muy comprometidos y con la ilusión a tope para los últimos dos partidos”.
Recordar que el próximo partido de Cobreloa, que bien podría denominarse de mil puntos, es nada más que ante la Universidad Católica, que se presentará en el Zorros del Desierto el próximo sábado 2 noviembre, a contar de las 18:00 horas.