A Cobreloa le restan dos partidos como local de los cuatro totales que le faltan antes del término del Campeonato Nacional, y sumar puntos como anfitrión será clave para las aspiraciones de los loínos de salvar la categoría, por lo que ante un acto violento ocurrido en el partido ante Ñublense del martes de la semana pasada, la dirigencia naranja actuó de manera rauda.
El técnico visitante de aquel partido, Mario Salas, denunció tras el encuentro que recibió un botellazo en un brazo, lanzado por un hincha, y pidió sanciones por la agresión. Antes de que la ANFP pudiera reaccionar al hecho, la propia dirigencia naranja identificó al individuo que lanzó la botella y lo borró de su base de datos, para impedirle el ingreso en futuras ocasiones, según informó El Mercurio de Calama.
Luego de esto, el Tribunal de Disciplina realizó su sesión semanal, el pasado martes, y decidieron archivar el caso hasta la sesión de la semana siguiente (martes 8 de octubre). En dicha instancia el presidente del club o algún representante deberá asistir de forma presencial a la ANFP para esta sesión.
Cobreloa podrá recibir partido vital por la permanencia en Calama
Este lunes 7 de septiembre se cerrará la fecha 27 del Campeonato Nacional con el duelo entre Cobreloa y Deportes Copiapó en el Zorros del Desierto, en un duelo que enfrenta a los dos equipos que están en zona de descenso de cara a las últimas jornadas del torneo.
Luego de eso, y tras visitar a Deportes Iquique por la fecha 28, el equipo dirigido por César Bravo recibirá a Universidad Católica en el último partido del año que se jugará en Calama, para luego terminar con O’Higgins en Rancagua.
