Este primer semestre ha sido de ensueño para Cobresal, ya que los dirigidos por Gustavo Huerta han demostrado un buen fútbol que se ve reflejado en los resultados, posicionándose primeros de la tabla con 28 puntos y siendo el mejor equipo de local. Pese a lo anterior, no todo ha sido alegría, ya que sufrieron la sensible baja de Pablo Cárdenas por una complicada lesión.
En el encuentro válido por la fecha ocho del Campeonato Nacional, los Mineros visitaron a Coquimbo Unido en el estadio Francisco Sánchez Rumoroso, donde Cárdenas alcanzó a jugar tan solo 13 minutos antes de ser retirado en camilla debido a una fea lesión que, incluso, lo hizo llorar del dolor.
Luego de un par de días, Cobresal, mediante un comunicado en sus redes sociales, informó sobre la situación del jugador y confirmó lo peor: “Lamentamos comunicar a nuestros hinchas que, de acuerdo a la revisión médica y los resultados de la resonancia magnética, nuestro jugador Pablo Cárdenas sufrió la rotura del ligamento cruzado de su rodilla derecha”.

Ya han pasado tres meses de aquella lesión y el martes pasado el jugador volvió a pisar una cancha, para comenzar su reintegro deportivo de a poco y poder estar lo antes posible a disposición para el técnico Gustavo Huerta. En diálogo con En Cancha, Cárdenas comentó su regreso a las prácticas.
“Volví a la cancha hacer un poco más de trote y algunos movimientos para ir de a poco. En cuanto a una fecha de regreso, espero seguir evolucionando bien para ya el sexto mes ir a mi último examen médico (...) Lo único que tengo en mente en este minuto es recuperarme”, comentó el lateral derecho.
El jugador se refirió al momento exacto en que sufrió la lesión, en donde destacó que “supe de inmediato que me corté ya que por dentro sentí todo roto y efectivamente el dolor fue muy fuerte, al principio no lo sentía con tanta intensidad por la adrenalina”.
La vuelta a las canchas
Por lo general la rotura de ligamentos cruzados tiene una recuperación que va desde los seis a los ocho meses. En el caso de Pablo Cárdenas se espera que al sexto mes ya esté de regreso en las canchas. De hecho, su evolución ha sido mejor de la esperado y comenzar con el trote al tercer mes de la lesión es un buen indicador de cara a lo que viene.
“Desde el primer momento me mentalicé en que me tenía que recuperar lo más rápido posible y que el proceso sería largo, pero mientras uno se mantenga positivo ayudará mucho para la evolución (...) Lo primordial ahora sería recuperarme y volver a jugar en Cobresal”, añadió el jugador de 23 años.
Finalmente, el lateral por derecha se refirió al apoyo que ha recibido por parte del club durante estos meses y cómo han influido en su recuperación: “Se han portado súper bien, todos pendientes de mí, dirigentes, compañeros, cuerpo médico, cuerpo técnico en general... Ha sido muy grato saber que están preocupados por mí”.