El buen presente de Cobreloa en la Primera B se contrarresta con las dificultades económicas que atraviesa el club, que está afectando a otras ramas del equipo. Incluso, desde la sub 17 y 20 de los loínos aseguraron que no tienen alimentos en las instalaciones que presta la institución.
Byron Velásquez, cadete loíno y representante de las dos series antes mencionadas, realizó un punto de prensa para revelar las condiciones en las que están viviendo en este momento, donde señaló que se las tienen que ingeniar para poder comer cada día.
"La casa de cadetes no tiene nada y tenemos que sustentarnos nosotros. Es compleja la situación, no tenemos equipos ni la ropa. Se supone que viene en camino, pero no hemos sabido nada. No tenemos balones, venimos usando las mismas pelotas de los últimos dos o tres años. No está llegando mercadería a la casa, lo que complica los desayunos y los almuerzos", expresó a En La Línea.
Además, el juvenil sostuvo que el presidente Fernando Ramírez se acercó en solo una oportunidad a escuchar las inquietudes de las promesas de Cobreloa. Sin embargo, la situación no ha mejorado.
"Al principio vino el presidente para ver el tema de la comida y los balones, pero nada más. Esperamos que se solucione esto y que la dirigencia comience a hacer las cosas bien para que estemos todos en una buena situación, nos lo merecemos. Esta última semana no hay casi nada de comer, antes nos la podíamos arreglar", comentó.
Por último Velásquez agregó que esto "incomoda porque no es lo que merece este club, los chiquillos que están en su primer año no están contentos. Vamos a seguir entrenando y dando lo mejor de nosotros, pero no son las condiciones. Varios han traído sus comidas y hay que comer lo que hay".
De esta forma, quedó en evidencia los serios problemas económicos que atraviesa Cobreloa, que vienen de la mala gestión de la anterior directiva y está afectado de sobremanera a las cadetes del club.