Jaime García se ha transformado en todo un ícono en Chillán. Sus buenos resultados con Ñublense cuentan un ascenso a Primera División, una clasificación a Copa Sudamericana al año siguiente y en la presente temporada con opciones de una histórica clasificación a la Copa Libertadores. Los buenos números emergen en conjunto con una personalidad que lo lleva a ser muy querido en la zona.
Una de las muestras de cariño es un mural en la Calle Manuel Plaza en las afueras del estadio Nelson Oyarzún. En la obra realizada por dos artistas locales que integran la hinchada "Los Rediablos" está el rostro del fundador del club, Manuel Lara Gutiérrez, del DT que consiguió el primer título con la institución en la Primera B 1976, Isaac Carrasco, y también el de García.
En el programa "Dimensión Deportiva", al entrenador le mostraron imágenes del mural que integra junto a dos leyendas del club chillanejo y el nacido en Cartagena no pudo contener la emoción y se quebró al ver una nueva muestra de afecto por parte de los fanáticos.
"Ñublense me ha parado la olla estos cuatro años"
El entrenador oriundo del Litoral de los Poetas se mostró en su estilo sencillo y sin cassette a la hora de hablar de su sentimiento por el equipo chillanejo: "El cariño es reciproco y creo que me lo he ganado con creces. Yo no he perdido mi esencia. Cuando a mí me han dicho 'Jaime ¿Te gustaría irte para otro lado?' yo siempre he nombrado que me gustaría quedarme, pero es por un tema de que yo estoy contento acá, alegre y me estoy desarrollando en todo sentido", expresó.
Si bien sabe que tiene que tendrá que partir en algún momento, valoró todo el cariño: "Es muy difícil cambiarse de la noche a la mañana, sé que en un momento voy a tener que partir, pero yo todo lo que he hecho ha sido de corazón. Por eso a veces me molesta mucho cuando ponen comentarios estúpidos. Ha sido tan recíproco todo esto que me ha pasado, he crecido y he madurado como persona, como técnico. No puedo ser mal agradecido, Ñublense es el que me ha parado la olla estos cuatro años, eso tiene un valor histórico y para mí infinito que yo no voy a olvidar", agregó.
"Me han hecho ser un hombre con equivocaciones, con errores, con muchas virtudes (...) hacerte un mural, es inédito, porque nunca pensé ser técnico, llegar a donde estoy y lo he hecho solito, sin matar a nadie. Tener esta afinidad con la gente tiene un valor impagable para mí", finalizó el cartagenino.