Tan solo dos partidos separan a Cobreloa de la gloria máxima en el último tiempo. Lejos de aquellas grandes gestas en Copa Libertadores o sus consagraciones como campeón del Torneo Nacional, a los loínos solo les quita el sueño una cosa: volver a la Primera División.
El conjunto naranja bajó en el 2015 y desde entonces no ha podido consumar su ascenso, algo que espera materializar este 2023 y de forma directa, ojalá -como esperan en Calama-, consiguiendo el boleto directo por ganar la Primera B.
Mañana el cuadro de Emiliano Astorga jugará ante San Luis de Quillota en el Zorros del Desierto, pero también, aunque no lo admitan, están mirando de reojo la última fecha ante Rangers, que de seguro será clave para ver si se sube directo o se va a una Liguilla de Ascenso.
Todos quieren estar en Cobreloa
Es más, el argentino Matías Ballini, una de las figuras loínas, hizo una petición especial a la dirigencia del club: que por favor den la pelea para quitarle su tarjeta amarilla y así estar ante los talquinos.
“Es lamentable porque esa amarilla en Temuco fue injusta y pedí a ver si me la pueden defender y poder estar en esa final”, dijo a El Mercurio de Calama.
“Pero hoy nos concentramos en San Luis, que llega en buen momento a Calama y con el cual tenemos la obligación de mostrar ese rendimiento tan positivo que tuvimos en la segunda rueda jugando en casa”, añadió.
El esperado choque entre Cobreloa y San Luis de Quillota se jugará este lunes en el Zorros del Desierto, a contar de las 17:30 horas.
