Para Deportes Antofagasta, la temporada 2022 del fútbol chileno estuvo marcada por el descenso a Primera B. Mal año para los “Pumas” y, entre los motivos que finalmente desencadenaron en la pérdida de categoría, estuvieron los problemas que tuvo para utilizar la cancha principal del Estadio Calvo y Bascuñán, supuestamente el recinto donde es anfitrión.
De hecho, la pérdida por secretaría del partido ante Palestino, en las fechas finales, terminó por sepultar las aspiraciones del CDA. Esos puntos, a la postre, fueron decisivos para sentenciar el descenso.
Para este año, el panorama no ha cambiado mucho y la escuadra del norte sigue encontrando inconvenientes para jugar en su cancha. Hoy, el estadio se encuentra en una mantención programada que le impedirá a Deportes Antofagasta utilizarlo hasta mayo.
Luego de la realización de un festival por el aniversario de la ciudad el 14 de febrero, las autoridades edilicias comenzaron con los trabajos de resiembra del césped principal y también de las canchas aledañas. Labores programadas y que se realizan anualmente, pero que perjudicarán directamente al CDA.
El alcalde de la Ilustre Municipalidad de Antofagasta, Jonathan Velásquez, explicó en declaraciones que reproduce el Diario La Estrella de esa ciudad que “algunas personas se quejan sobre el pasto, pero aquí hay un proceso normal que ocurre cada año, la sobresiembra”.
El CDA jugaría en el Zorros del Desierto
Ante la imposibilidad de utilizar el Estadio Calvo y Bascuñán, las autoridades del club realizaron las gestiones para arrendar el Zorros del Desierto de Calama y es allí donde tienen planeado jugar sus próximos partidos como locales, hasta que finalicen las reparaciones.
El calendario de la Primera B 2023 contempla cuatro localías de Deportes Antofagasta durante el periodo de arreglos del Calvo y Bascuñán: deberá, entonces, tener un recinto alternativo para los partidos ante Santiago Morning, Deportes Recoleta, Deportes Santa Cruz y Deportes Temuco.