Alzó como capitana la Copa Libertadores con el imbatible Colo Colo de 2012. Ganó seis títulos nacionales con Las Albas, antes de partir a Brasil y a España. Volvió a suelo nacional y festejó dos Campeonatos con Santiago Morning (2019 y 2020). ¿Algo más? Es la única chilena en marcar un gol en unos Juegos Olímpicos (Tokio 2020), suma dos mundiales en el cuerpo con La Roja (Sub 20 2008 y Francia 2019) y es la cuarta futbolista con más presencias en la historia de la Selección Chilena (78 partidos, 12 goles).
¿Es todo? Ni cerca… Se metió para siempre en el corazón del Sevilla FC al marcar un golazo a estadio lleno en el Benito Villamarín ante el Betis.
Hablar de Karen Andrea Araya Ponce es codearse con lo más selecto del fútbol chileno. Es la historia viva de la evolución del fútbol femenino en Chile y hoy se enfoca en la actividad con la sabiduría que le dan sus horas de vuelo. "No pienso retirarme todavía", aclara de entrada en una conversación exclusiva con En Cancha que, de tanto en tanto, se interrumpe cuando hinchas se le acercan para congratularla.
Acaba de terminar la temporada de la Primera Iberdrola en España y la puentealtina cerró su segunda estancia en el conjunto sevillano. "Llegar ahí fue muy lindo. Poder reencontrarme con la gente que me conocía, que me quería. Vi muchas caras nuevas también. Me sentí como si hubiera estado en mi casa de vuelta", dice.
"A nivel de empatía y de relación con mis compañeras, la experiencia fue mejor incluso que la primera vez. Me hubiese gustado jugar más de lo que jugué, pero me quedo muy tranquila con las cosas que hice".
-¿Encontraste una Liga distinta respecto de la primera experiencia en el Sevilla?
-La Liga cambió muchísimo. Es un torneo mucho más físico, mucho más intenso, con mejores jugadoras. El Barcelona es el equipo que se arranca, pero después el segundo puede perder con el último y el tercero con el penúltimo. El Barcelona era de otra liga, pero el resto estábamos todas ahí. La Liga tiene muy buena competencia.
-¿Con cuál de las dos experiencias en el Sevilla te quedas?
-Difícil. Cuando estuve el 2018/2019 estábamos a punto de descender, así que fue muy dura la pelea. Nos salvamos casi en la última fecha. Ahora, fue mucho más tranquila, porque estuvimos octavas y nos mantuvimos en ese puesto. Sí tuviera que elegir, iría por esta última, porque me sentí mejor en el grupo, me sentí más completa con mis compañeras. Hice buenas amistades este último tiempo. Fue más fraternal y acogedor.
A la espera de una buena oferta
La "8" de la Selección no se atormenta por el futuro. Sabe que para una jugadora de sus quilates, las ofertas no faltarán. Hoy disfruta de sus vacaciones, pero en el ambiente del Futfem crece la incertidumbre sobre el destino de Araya para la próxima temporada. "No sé dónde jugaré; no he tomado una decisión. Estoy esperando a ver qué pasa".
-Pero alguna pista habrá sobre tu próximo equipo…
-Me gustaría mantenerme en La Liga, pero no me cierro a nada. No tendría problemas en ir a cualquier otro sitio, a Brasil, a México o seguir en España. Me gustaría jugar la Champions League, así que tendría que ir por ese lado…
-¿Te cierras a la posibilidad de volver a Chile? Porque en Colo Colo y en el Chago dejaste recuerdos imborrables…
-Siempre al final una tiene lindos recuerdos y se emociona con lo que vivió en los lugares donde estuvo. Yo le tengo muchísimo cariño a Colo Colo, por ejemplo, por el tema de la Libertadores; al Chago también, donde estuve muchos años. Les tengo mucho cariño a ambos clubes y si tuviera la posibilidad sería también una opción. No le cierro las puertas a ningún equipo, mientras me ofrezca un buen proyecto.
-¿Y llegar a la U, por ejemplo?
-No me referiré a equipos en específico, porque luego se presta para polémicas. Me da mucha risa y no lo entiendo, por ejemplo, cuando la Vale (Valentina) Díaz se va de Colo Colo a la U o Fernanda Ramírez de la U a Colo Colo y la gente reclamaba porque se cambiaban de un club a otro. La verdad es que en el fútbol femenino eso no es así. Nosotras tenemos que vivir y por eso vamos donde nos ofrezcan las mejores condiciones. Lo importante es respetar los colores y los hinchas de cualquier club donde te toque jugar.
Una vida con La Roja
Ella misma se sorprende con el dato. "¿De verdad?", dice entre risas, cuando recapitula que Colombia 2022 será su quinta Copa América defendiendo a Chile. Estuvo con 17 años recién cumplidos en Argentina 2006 y, de ahí en adelante, jugó en Ecuador 2010, Ecuador 2014 y Chile 2018. De no mediar un suceso realmente extraordinario, también dirá presente en la cita en tierras cafeteras.
"Tengo la misma emoción de siempre. Cuando una viene a la Selección, siempre está la misma ilusión, las mismas ganas y los deseos de hacer lo mejor. Quiero clasificar de nuevo al Mundial".
-Se ve difícil este año…
-Es que las selecciones de Sudamérica han mejorado mucho. La mayoría de las jugadoras salieron de sus países y vuelven a sus selecciones con otra dinámica, con otro fútbol, y eso potencia. La gran mayoría de las jugadoras están afuera. Será la Copa América más competitiva que hayamos disputado en el último tiempo.
La voz de alerta sobre el recambio
Aunque debutó dos años antes en La Roja Adulta (10 de noviembre de 2006), Karen Araya corresponde a la generación del Mundial Sub 20 de Chile 2008 (Christiane Endler, Daniela Pardo, Daniela Zamora, Geraldine Leyton). Luego vino la clase de 2010, que con brillantez clasificó al Sub 17 de Trinidad y Tobago (Camila Sáez, Yanara Aedo, Fernanda Pinilla, María José Urrutia, Rocío Soto) y, en esas dos camadas, más el aporte de otros valores esporádicos, se encuentra el núcleo de la Selección.
¿Qué viene más abajo? El análisis de alguien tan avezado como la mediocampista de La Roja es fundamental. "El panorama hacia abajo lo veo lento. Creía que la Sub 20 iba a llegar mucho más lejos. La Sub 17 me parece que es una muy buena categoría, hay buenas jugadoras. Estuve entrenando con unas Sub 20 y Sub 18 y hay buenas niñas, buen material, pero hay que trabajar. Pero en nuestra Liga la competencia no es tan buena y mientras no se trabajen esas niñas, al final se irán perdiendo".
-¿Pero qué habría que hacer, entonces, cuando se detecta un talento?
-Mientras más joven empiecen, mucho mejor. No sé si a nivel de clubes o de Selección, pero hay que preocuparse de que esos talentos jóvenes se potencien. Haciendo microciclos, yendo cada mes a la Selección. Inventar alguna estrategia para que esos talentos no se pierdan. Se deben potenciar tanto física como futbolísticamente… Uno en la Liga Chilena puede jugar caminando sin problemas y te encuentras con otras realidades cuando te vas a Europa, a Brasil o a México.