La última reunión de directorio de Blanco y Negro terminó en un escándalo de proporciones: gritos, insultos e incluso golpes, que involucran Aníbal Mosa (presidente de la concesionaria) y Carlos Cortés (bloque Vial).
De acuerdo a la información recabada por En Cancha, todo ocurrió cuando el actual mandamás de Colo Colo, sin previo aviso, designó a Gustavo Poblete como gerente de operaciones.
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El hombre en cuestión cumplió dicho cargo en la ANFP, durante el mandato de Sergio Jadue, y también lo hizo en Colo Colo a partir de 2016. Sin embargo, Carlos Cortés consideró autoritaria la decisión de Aníbal Mosa y manifestó su malestar, primero con palabras y luego con insultos.
Ahí fue cuando el abogado rodeó la mesa y se acercó al empresario de origen sirio para agredirlo. Si bien algunos directores presentes trataron de contenerlo, finalmente logró propinarle un golpe que lo hizo caer de la silla y remató con una patada.
Aníbal Mosa salió escoltado del Estadio Monumental y se dirigió a la Clínica Bupa, donde apareció en silla de ruedas con cuello y bota ortopédica.
Aníbal Mosa rompió el silencio
Aníbal Mosa habló en conferencia de prensa durante esta jornada y aclaró varios puntos respecto a la agresión de Carlos Cortés, como por ejemplo, que nunca se cayó de forma accidental y que sí hubo agresión por parte del abogado.
Además, el actual presidente de Blanco y Negro aseguró que quedó en shock por lo sucedido, pero que aún así no piensa renunciar al cargo.
“Hay un curso legal que está corriendo y por otro lado también va a correr un tema administrativo que tiene que ver también con los valores que tiene que tener un dirigente de fútbol para ver si este puede seguir desarrollando esa actividad”, indicó Mosa.
Carlos Cortés, por el momento, no ha entregado su versión de los hechos.
