Colo Colo tuvo una brillante actuación ante Universidad Católica, en donde no hubo puntos bajos, al menos en los titulares. El técnico se vio obligado a meter mano en el segundo tiempo, pues el gol no llegaba y necesitaba nuevas alternativas en ofensiva para ganar el encuentro.
Fue ahí cuando tomó la determinación de sacar a Guillermo Paiva y permitir el ingreso de Marcos Bolados. Su misión era desequilibrar, los 20 minutos que quedaban, por derecha y ser un constante agente en ofensiva, pero no logró plasmar todo lo que le solicitó el técnico en la charla previa.
Marcos Bolados nuevamente aburrió a Jorge Almirón
Entró y ya en la primera jugada de peligro que tuvo se llevó todos los retos. Esto debido a que comandaba una contra inmejorable, pero terminó entregando un centro deficiente, por lo que la jugada terminó en nada, de hecho, obligó a Lucas Cepeda a exigirse más de lo normal.
Posteriormente tuvo un mano a mano por la banda derecha, la que terminó en el robo de un defensor de Universidad Católica, provocando la tirria de Jorge Almirón, que no dudó en gritarle de todo para que se metiera en el partido.
Todos estos detalles pesan bastante, sobre todo en estos momentos en los que no tiene asegurada su continuidad en Colo Colo. Cabe destacar que su contrato finaliza en diciembre de este año y cada partido que pasa pierde la oportunidad de renovar.
Ahora Marcos Bolados es la opción que le va quedando a Jorge Almirón por ese sector, pues ya cortó a Cristián Zavala por su rendimiento. De todos modos es la última variante del argentino, tanto así que ahora es Lucas Cepeda el que se adueñó del puesto.