Colo Colo protagoniza una gran disyuntiva en 2024, debido a que su mercado de pases ha sido muy malo, lento y el plantel aún no lo cierra, pero a la vez hizo el mejor fichaje de la historia, trayendo de regreso a Arturo Vidal.
Pese a que el Bloque Vial de Blanco y Negro no quería el retorno del King, e hicieron de todo para “espantarlo”, el seleccionado nacional terminó firmando por el Cacique por todo la temporada.
Si sacamos a Vidal, Colo Colo no tiene ninguna cara nueva, porque la concesionaria no ha podido traerle jugadores a Jorge Almirón, y además todavía puede perder a una de sus grandes figuras: Carlos Palacios.
Boca insiste por la Joya
Pese a que la Joya llegó a un acuerdo para seguir jugando por el cuadro popular, Boca Juniors mantiene su intención de quedarse con los servicios del talentoso mediocampista creativo formado en Unión Española.
El libro de pases en Argentina cerró este viernes, pero la tienda que preside Juan Román Riquelme hizo una movida de última hora para tener más tiempo y así seguir intentando contratar a Palacios.
Boca se desprendió del defensor paraguayo Bruno Valdez, quien llegó a un acuerdo para ser jugador de Cerro Porteño, por lo que las bases del fútbol argentino le dan la opción de realizar un fichaje internacional más, y tiene plazo de una semana más para que se materialice.
Pese a lo anterior, la tarea del elenco Xeneize se ve más que difícil, porque Colo Colo tiene los derechos federativos de Carlos Palacios, porque su préstamo recién caduca a mediados de 2024, además, posee el 20% de la carta del jugador (el restante 80% es de Vasco de Gama), por lo que tiene el sartén por el mango y los argentinos deberán indemnizar a Blanco y Negro por la cesión que está vigente, y pagar el porcentaje del pase del futbolista, algo no menor.
La idea de Boca es tentar a Palacios con la vitrina del cuadro Oro y Cielo, aunque en 2024 ni siquiera clasificó a la Copa Libertadores, y deberá conformarse con jugar la Copa Sudamericana.