Durante la mañana de este viernes se reunió el directorio para votar y definir la continuidad de Gustavo Quinteros en Colo Colo. Finalmente, se determinó que el técnico trasandino no seguirá al mando del equipo para la temporada 2024, poniendo fin a un proceso de tres años y dos meses, en donde ganó un total de cuatro títulos.
La obtención de la Copa Chile no fue suficiente para que Quinteros logrará la renovación en el Cacique. El trasandino entregó sus condiciones para extender el vínculo, pero no fue suficiente para que el directorio tomara la decisión de extender el vínculo.
Pese a lo tormentosa de la temporada 2023, los números avalan a Gustavo Quinteros en la banca de Colo Colo. Durante los tres años y dos meses, ha dirigido un total de 153 encuentros, registrando 79 triunfos, 41 empates y 33 derrotas, siendo uno de los técnicos con más partidos en la banca de los albos.
Además, entró en el selecto grupo de los adiestradores más ganadores del cuadro albo, ya que registra cuatro títulos en Macul. Son dos Copa Chile, una Supercopa Chile y una Campeonato Nacional en la temporada 2022. Con esto quedó detrás de técnicos como Arturo Salah (5), Pedro García (5) y Mirko Jozic (6).
Las razones que podrían haber afectado la renovación de Gustavo Quinteros.
Hay tres razones que le quitaron piso a Gustavo Quinteros dentro de Colo Colo. Una de ellas fue la forma en que Quinteros abordó el caso de Jordhy Thompson, declarando de forma polémica, tomando la decisión de hacerlo jugar y dándole un apoyo que, para el Club Social y Deportivo, no correspondía debido al grave delito que cometió el jugador.
Otra acción que no gustó dentro del directorio fue la supuesta reunión que tuvo con Racing de Avellaneda este lunes, en donde es uno de los candidatos para asumir el banco del equipo. Finalmente, solo fue una reunión informal para saber las condiciones del trasandino, las que no prosperaron.
Pero el motivo que más peso tiene son los constantes choques que tiene la dirigencia con Gustavo Quinteros, puesto que lo consideran como alguien “ingobernable” debido a que se opone a ventas y pide refuerzos, entre otras decisiones.