El Caso Pablo Solari en Colo Colo generó un gran problema al interior del equipo. El delantero argentino pretendía salir en esta ventana de mitad de año al América de México, elenco que estaba dispuesto a poner una millonaria cifra para contar con sus servicios.
Sin embargo, y luego de una extensa reunión de directorio, en el "Cacique" se decidió no venderlo para no despotenciar el equipo, y cualquier oferta por el "Pibe" será analizada solo cuando culmine la temporada.
Al atacante trasandino no le gustó la medida adoptada y, según pudo averiguar En Cancha, hoy lo hizo patente: el jugador "se plantó" ante Gustavo Quinteros y no quiso jugar el amistoso ante Atlante -igualaron 1-1-, pese a que estaba contemplado en el once inicial, pues ayer había entrenado en el equipo titular.
La postura de Solari es clara: quiere ser vendido. Quien salvara a Colo Colo del descenso veía con muy buenos ojos fichar en las Águilas del América, tanto por un tema económico como deportivo.
La charla pendiente con Solari
Ante esto, en el club tomarán medidas para intentar calmar las aguas. De hecho, En Cancha también supo que se realizará una reunión con el jugador para contenerlo emocionalmente, y ya con los ánimos más fríos, explicarle por qué no es conveniente que deje al "Popular" en junio.
Por ahora, a Solari no le quedará más que esperar a que pase la calentura y enfocarse en terminar de la mejor forma la temporada con Colo Colo, donde debe afrontar Campeonato Nacional, Copa Chile y Copa Sudamericana en este segundo semestre.
