Se acabó la pesadilla. Tras varios meses de sufrimiento, esta tarde Colo Colo derrotó a Universidad de Concepción por la cuenta mínima en el partido de desempate por el descenso y dejó atrás el fantasma de la Primera B.
Fue un juego tenso, sin brillo, reflejando la enorme presión que vivían ambas escuadras. Y así lo reflejó el plantel y cuerpo técnico albo en el pasto del Fiscal de Talca, fundiéndose en una extraña mezcla de alegría y desahogo, con risas y llanto tanto entre los jugadores como en los dirigentes y el cuerpo técnico de Gustavo Quinteros.