El ambiente sigue tenso en Cobreloa. El empate sin goles del domingo en el Zorros del Desierto ante Deportes Iquique significó al menos una semana más de espera para celebrar el primer triunfo del año, además de dejar al cuadro loíno con mínimas opciones de avanzar a la siguiente fase de Copa Chile.
Debido a esto el margen de error para el cuerpo técnico de César Bravo llegó al mínimo, y coincidentemente, los próximos dos partidos serán ante el único cuadro que Cobreloa ha vencido este año (2-1 en un amistoso jugado durante la Tarde Naranja): primero por la Liga de Ascenso, y luego por el grupo A de Copa Chile.

Estos dos clásicos de la Región de Antofagasta se jugarán con nueve días de diferencia: el primero será este viernes 28 de marzo en el Zorros del Desierto, y el siguiente el sábado 5 de abril en el Calvo y Bascuñán.
Cobreloa necesita ganar para no hundirse en Primera B y mantenerse vivo en Copa Chile
La falta de triunfos tiene al cuadro naranja en una posición complicada en ambas competencias. Los tres empates y una derrota conseguidos en la Liga de Ascenso tienen a los loínos en la decimotercera plaza de la tabla, muy lejos de los lugares de avanzada.
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Mientras que en Copa Chile necesitan sumar sí o sí al menos una unidad (siempre y cuando Iquique no venza a Copiapó), para llegar al último duelo contra el equipo de Hernán Caputto con opciones de avanzar de ronda.
Si bien la situación en ambas competencias es compleja, la más urgente es la de Primera B y el partido de esta semana ante los Pumas, ya que un triunfo ayudaría a calmar la inquietud que hay en la hinchada por la falta de victorias, sobre todo en condición de local.