Todo apunta a abril de 2025. El nuevo estadio de la Universidad Católica, denominado ahora Claro Arena, alcanza hoy en un 90% de desarrollo, y si todo sale según lo planeado la UC podría jugar allí en medio de la primera rueda del Campeonato Nacional.
“Este estadio va a ser un referente en Latinoamérica. Tiene cosas de estadios europeos. Hemos traído nuestro conocimiento de allá. Pero también tiene cosas del lugar (la precordillera), de Chile, del sitio fantástico donde está. Es verdad que no es uno de los estadios más grandes, pero por todas las características que tiene y lo que va a suponer, va a ser un referente”, le dijo César Azcárate a La Tercera.
El español, uno de los arquitectos de la empresa IDOM a cargo de la remodelación, y apuntado como uno de los cerebros del remozado recinto cruzado, apunta a poder seguir realizando proyectos en Chile.
En ese sentido, los otros equipos grandes de la capital, como Colo Colo y Universidad de Chile, apuntan a remodelar y construir, respectivamente, por lo que bien podrían mirar para San Carlos de Apoquindo.
“Soy un enamorado del fútbol y de los estadios. Creo que cada día hacemos cosas de manera más interesante. Estaría encantado de tratar de hacer propuestas para estadios que quieran pegar ese cambio que la sociedad está demandando. Nosotros felices de aportar lo que podamos. Estoy abierto a nuevas experiencias”, añadió el arquitecto.
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Claro Arena: una experiencia nunca antes vista en Chile
Más allá de algunas críticas al cambio de nombre y todo el romanticismo que suponía San Carlos de Apoquindo para los fanáticos de la UC, Azcárate tiene algo muy claro.
“Este estadio va a cambiar de una manera radical lo que se vive en el fútbol y la gente lo va a comprobar cuando se abran las puertas y el equipo vuelva a jugar”, cerró.