Los accionistas de Fernández Vial tuvieron una reunión de directorio esta tarde para definir los próximos pasos del club, que deberá jugar el próximo año en Tercera División tras quedar últimos en la tabla de Segunda. Pese a la mala gestión financiera, Adrián Glickman y Martín Iribarne, cabezas de la dirigencia, quieren seguir al mando de la institución.
Según indicó Sabes Deportes, los accionistas del grupo Glans incluso tienen un plan para saldar los $70 millones que necesitan pagar a la ANFA y así poder disputar el torneo de Tercera A el próximo año: el certificado de “no deuda” debe ser presentado al ente rector del fútbol amateur a más tardar el 17 de diciembre.
La situación financiera del club indicaba que hasta reunir ese monto sería complejo, pero Iribarne y Glick ya tienen todo pensado: el pago por mecanismo de solidaridad que generó la venta de Felipe Loyola desde Huachipato a Independiente de Avellaneda, la venta de Diego Sanhueza a La Serena, el ingreso de un nuevo inversionista a la SADP y el pago de suscripciones pendientes de algunos accionistas darían el monto total para saldar la deuda.
El monto que le corresponde a Fernández Vial por Loyola
A mitad de año Huachipato realizó la venta del 50% del pase del seleccionado chileno a Independiente de Avellaneda por 1,5 millones de dólares, por lo que a Fernández Vial le correspondió aproximadamente el 1,5% del monto total, debido al mecanismo de solidaridad por ser su primer club profesional, lo que vendrían siendo cerca de 22 mil 500 dólares, algo así como 22 millones de pesos.
Con este dinero, más otros ingresos que tienen contemplado Glickman e Iribarne para cumplir con la ANFA, llegarían a los $70.075.001 que necesitan y así no tener inconvenientes financieros de cara al inicio de la próxima temporada en Tercera A.
