El Campeonato Nacional de Segunda División suma ya nueve fechas de competencia. La tercera categoría de nuestro fútbol, como es habitual, ofrece una entretenida lucha por el único ascenso a la B, carrera que por el momento encabeza Deportes Melipilla, y también una batalla sin cuartel por evitar los dos descensos, puestos que hoy llenan Fernández Vial y Trasandino,
En el marco de la fecha 9, el domingo recién pasado Real San Joaquín perdió como local por 1-0 ante Deportes Rengo, en un duelo que les permitió a los de la Región de O’Higgins escalar a la sexta ubicación en la tabla. Sin embargo, el partido hace noticia por otro tema: las pésimas condiciones para la práctica del fútbol profesional de la cancha del Estadio Municipal de San Joaquín.
El lapidario informe del árbitro del partido Real San Joaquín vs Deportes Rengo
Entre mallas rotas, una cancha demarcada a la carrera y vistosos parches se jugó el cuentro entre metropolitanos y renguinos. Algo que no pasó inadvertido para el juez del partido, Franco Jiménez, quien entregó un lapidario informe a la ANFP sobre las condiciones del recinto.
De hecho, el partido comenzó con tres minutos de retraso, debido a que las mallas estaban rotas. Comienza el crudo relato del árbitro: “Muy malas condiciones del terreno de juego. Contaba con parches de pasto sintético en el centro del campo y ambas áreas, que sobresalían formando un relieve. Por otra parte, las líneas de marcación (banda y meta) estaban totalmente desgastadas, siendo pintadas sobre el cemento”, acotó el escrito.
El drama con las mallas del Muni de San Joaquín
Luego, el tema mallas, el cual tuvo un larguísimo desarrollo y una difícil solución. Jiménez detalló paso a paso lo ocurrido: “Las redes de ambas porterías se encontraban en pésimo estado... Tras la revisión del terreno de juego, dos horas antes del inicio del partido, se advierte a las autoridades locales sobre el pésimo estado de las redes de ambas porterías y se solicita la mejora de estas, identificando los puntos críticos”, se lee.
Pero el asunto no terminó allí. Luego, “en el tiempo del calentamiento y activación física, me percato de que no acogieron nuestra solicitud de mejorar el estado de las redes de la portería, volviendo a extender la solicitud”.
Hasta que el partido tuvo que empezar más tarde, porque las mallas todavía presentaban deficiencias. “Finalmente, haciendo el ingreso protocolar al terreno de juego y tras la revisión final para dar inicio al partido, nos percatamos que las mallas se mantenían igual, debiendo pedir al cuerpo técnico del equipo local (Real San Joaquín) que solucione el problema, retrasando el inicio del partido en tres minutos”, cerró la declaración del juez.
Ahora, el Municipal de San Joaquín tendrá un breve descanso, pues en la próxima fecha el conjunto metropolitano jugará con San Antonio Unido en calidad de visita. Los “Chicos Buenos” volverán a actuar en casa el próximo domingo 12 de mayo, cuando reciban a Trasandino.