El ciclo de Ricardo Abumohor comandando a O’Higgins está llegando a su fin, ya que el club está oficialmente en venta. Esto debido a que desde la familia del ex presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) pretenden que el nuevo dueño le otorgue un salto de calidad a la institución, algo que hoy no se puede concretar por la falta de recursos económicos.
Según información recabada por En Cancha, el mandamás rechazó varias ofertas concretas, entre las que destacan una de Rusia y otra de México, países en donde hubo empresarios que estaban realmente interesados en aterrizar en la ciudad histórica.
Sin embargo, la familia Abumohor, que rige los destinos de los celestes desde el 2006, rechazó las suculentas propuestas por dos razones. Una de ellas es debido a las dudas que generaban ambos ofrecimientos con respecto a la real intención que tenían desde el extranjero con la institución.
La segunda, en tanto, tiene que ver con que la opción uno la tiene el empresario de Rancagua, Michael Jiménez, ya que quieren que el club “se quede en la ciudad” y siga teniendo ese sentido de pertenencia que tiene, sobre todo desde aquel histórico campeonato del 2013.
Si bien desde lo económico ambas ofertas eran seductoras, lo primordial para Abumohor y compañía es entregar el club en seguras y buenas manos, situación que no estaba cien por ciento asegurada con los inversores extranjeros.
Empresario rancagüino puso en pausa la adquisición de O’Higgins
En entrevista con Radio Rancagua, Michael Jiménez, confeso hincha de O’Higgins y principal candidato a comprar el conjunto celeste, señaló que las negociaciones con la familia Abumohor están, de momento, congeladas.
“No se llegó al total de los antecedentes. Hubo una muy buena disposición de Cristian Abumohor, de su papá y su familia. Nada que decir. Ya fue más un tema de abogados y de cosas, de detalles que en el fondo uno está enfocado y entusiasmado en comprar el club y cuando ve situaciones que se van dilatando, no es que uno se aburra... Yo siempre voy a tener la ilusión, el sueño de ser el dueño de O’Higgins. Pero más que nada, por esas circunstancias de retrasar los documentos, me sentí desplazado”, sostuvo.
Si bien las negociaciones con Jiménez se encuentran estancadas, estas no están totalmente caídas, ya que se espera que en los próximos meses se reanuden las conversaciones para sentenciar el cambio de dueños del cuadro rancagüino.
