Jaime García vive un complicado inicio de temporada con Ñublense. El “Búfalo” se ha tenido que adaptar a un plantel totalmente renovado tras la salida de varias de las figuras de la temporada 2022, pero a esa situación se le sumó el pésimo estado de la cancha del Nelson Oyarzún de Chillán.
“Respeto, a veces hay momentos que uno tiene que culminar sus proyectos bien y creo que este es el año. ¿Qué quieres que te diga? Merezco respeto, así como yo he criticado otras canchas, para una Copa Libertadores o para lo que nosotros queremos, si tú me preguntas ahora, no está”, expresó el oriundo de Cartagena.
El entrenador no está interesado en buscar responsables del mal estado del campo de juego: “Esto viene de todos, desde acá hasta allá abajo. Solamente pido lo que tiene que ser una cancha. Buscar culpables, yo no soy detective ni quiero serlo, no me interesa. Lo único que pido es eso, creo que lo merezco, a lo mejor tendría que tener un poco más de nombre para poder tener en óptimas condiciones, pero esto viene de todos lados”, añadió.
García también se mostró muy contrario a la posibilidad de que Ñublense pueda trasladar la localía a otra ciudad por la deplorable condición del césped del Nelson Oyarzún: “Es una autocrítica para mí, creo que el gran responsable soy yo. A lo mejor yo mismo no me respeto, hay cosas que no transo y no voy a justificar tampoco. Lo que tanto esperábamos de poder salir jugar a otro lado, no corresponde por nuestra gente, no se puede así, hay cosas que no me voy a callar, soy así”.

El “Búfalo” ve que el final de su proceso en los “Diablos Rojos” será en diciembre: “Hay que terminar bien el año, lo voy a hacer, por respeto al club y a la personas que están a cargo del club, de la persona que me trajo. Hay momentos e instancias para decir ‘ya, este año tiene que ser maravilloso, terminar maravilloso para volar”.
Los chillanejos se concentran en el compromiso que vivirán este viernes a las 20:30 ante la Universidad Católica por la séptima fecha del Campeonato Nacional 2023.