Marcelo Salas dejó un legado imborrable en River Plate. El delantero chileno llegó al club "Millonario" a mediados de 1996 desde la U y casi de inmediato se convirtió en figura de uno de los equipos más importantes de Sudamérica.
"Se adaptó rápidamente porque aquel River era un equipo muy técnico, con muy buen juego y pelota al piso", destacó el gran referente de ese equipo, Enzo Francescoli, en diálogo con Claudio Borghi el programa Historias de Cracks de TNT Sports. "Si hay algo que destaca a Marcelo es su gran capacidad técnica. Nos dio una mano grandísima, la gente lo recuerda y lo recordará siempre porque se adaptó muy rápido y contribuyó muchísimo. Cuando me fui, siguió haciendo goles de una gran categoría".
En dos temporadas en su primera etapa, el "Matador" anotó 31 goles en todas las competencias, ganando tres títulos de la Primera División trasandina y la Recopa Sudamericana 1997.
"Marcelo era uno de los pocos atacantes que siempre miraba para definir y elegía el lugar. Tomaba la pelota y estaba rodeado con uno, dos, tres jugadores, con poco espacio y siempre tenía ese momento en el cual sabía lo que iba a hacer y lo elegía. Eso es algo que muy pocos atacantes tienen", agregó Francescoli.
La conversación con Francescoli se emitirá este martes 11 de mayo a las 22:00 horas.