La temporada de AC Barnechea en Primera B quedó truncada luego de la desafiliación por parte de la ANFP, por lo que varios jugadores que realizaron una gran temporada tuvieron que dejar atrás su ilusión de poder subir a la máxima categoría del fútbol chileno.
Uno de ellos es el portero argentino Cristián Campestrini, quien a sus 44 años fue una de las grandes figuras del elenco Huaicochero en el Ascenso, siendo incluso la segunda valla menos vencida por detrás de Eryin Sanhueza de Deportes La Serena, que obtuvo el ascenso a Primera División.
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Cristian Campestrini, el jugador más longevo del fútbol chileno que busca club para 2025
El nacido en Buenos Aires terminó su etapa con Barnechea, luego de la dolorosa desafiliación, por lo que ahora se concentra en la búsqueda de un nuevo club para la próxima temporada, donde a mediados de año celebrará su cumpleaños número 45: “La edad es solo un número mientras no perdamos el espíritu amateur”.
Después de un grandísimo año en Primera B ¿Cómo tomaron la noticia de la desafiliación de Barnechea?
- La verdad fue sorpresiva la noticia porque veníamos haciendo un gran torneo, con muchas ilusiones de jugar la liguilla. Un error administrativo no nos permitió continuar luchando por este gran sueño, pero nos llevamos el mérito deportivo del gran torneo que defendimos y todo lo que brindó este plantel dentro de la cancha haciendo una gran campaña. Solo puedo sentir orgullo y admiración, se formó un plantel muy unido, sano y súper humilde.
Saliste campeón de Segunda División en 2023, y pese a tener 43 años Barnechea confió en ti y fuiste uno de los mejores porteros de la B.
- Tuve la suerte de formar parte de un gran plantel en Deportes Limache, que tenía la ilusión de ascender en una categoría durísima. Barnechea volvió a confiar en mi pasión, mi trabajo en el día a día y lo realizado en el 2022 que también fue una excelente campaña. Este año formamos un gran plantel, tanto en lo deportivo como en lo humano, lo que nos permitió potenciarnos y hacer un buen trabajo tanto individual como grupal, siendo el equipo más goleador, la segunda valla menos vencida, un proceso extraordinario. Superamos ampliamente nuestras expectativas en todo sentido.
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Respecto a la próxima temporada, donde cumplirás 45 años ¿Crees que es un impedimento para los clubes? ¿Se complica un poco la posibilidad de concretar algo?
- Sigo preparándome como lo hice toda mi carrera, con la misma responsabilidad y cuidados diarios. Hoy hay mucha información disponible, la que si sabemos capitalizar puede potenciar y darle ese plus a la carrera de todo atleta.
Entonces te sigues preparando para el llamado de algún club del fútbol chileno.
- Por supuesto, esperando con ilusión un nuevo desafío y un nuevo arco donde continuar con esta hermosa pasión. Creo que la edad es solo un número mientras no perdamos el espíritu amateur y las ganas del trabajo. No es para nada un impedimento seguir en esta linda profesión.
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¿Cómo te sientes al ser el jugador más longevo de nuestro fútbol chileno?
- Me siento feliz y agradecido. Siempre hay mucho por aprender y mejorar, no hay edad para eso. Este año en lo personal fue muy positivo, compartimos un hermoso hábitat con mis colegas del arco, respaldados por un gran profesional como lo es Sebastián Cabrera (entrenador de porteros) que con su dedicación logró lo mejor de cada uno para sacar la tarea adelante.
El próximo año me imagino que te ves jugando en Chile. ¿Crees que es tu último año en el profesionalismo?
- Mi idea es seguir en Chile. Mi gran sueño y objetivo es seguir atajando porque amo esto. No me pongo un plazo, tengo un objetivo que trabajo día a día, y es atajar hasta que el corazón diga basta. ¿Por el momento? Trabajar y trabajar.