Deportes Melipilla es el solitario líder de la Segunda División, con 40 puntos. Una de las grandes figuras del equipo es Bryan Taiva (29), centroatacante formado en la U. El futbolista llegó la temporada pasada al club y, producto de su buen rendimiento, a principio de año firmó un vínculo contractual por las próximas dos temporadas.
El sábado pasado, el exazul fue clave en la victoria por 2-0 sobre Fernández Vial. Asistió en el primer gol y anotó el segundo, diana que le permitió sumar ocho conquistas en la campaña y convertirse en el máximo artillero de su equipo y el sexto mejor ubicado del torneo.
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“En la Segunda División son todos los partidos difíciles, no importa el lugar de la tabla de posiciones. El fin de semana nos jugamos una final y ahora nos quedan siete más para lograr el ascenso”, comienza diciendo el artillero, quien sueña con dejar a Melipilla en lo más alto.
Bryan Taiva y sus objetivos con Deportes Melipilla
-Van punteros, pero la tabla arriba está muy apretada. ¿Qué tan cerca ven el ascenso?
-Hay clubes que nos vienen siguiendo muy de cerca, como Deportes Concepción y Puerto Montt, pero tenemos claro que si hacemos nuestro trabajo, tenemos muchas más chances de ascender que los demás. Hemos sido regulares y esperamos seguir así.
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-En 2023 quedaron a un paso de subir a Primera B con un plantel muy similar a este. ¿Cuál es la diferencia entre la temporada pasada y esta?
-Yo creo que este año llevamos de otra manera los partidos. Hay un tema más de concentración y nos mentalizamos que siempre tenemos que dar lo mejor, pues todos son rivales complicados. Si bien el grupo es el mismo del año pasado, hemos enfrentado de manera diferente a los rivales.
-¿Cómo te has sentido en este año y medio en Meliplla?
-Aquí en el club me recibieron muy bien y me he sentido como en casa. Mi meta a corto plazo es ascender con el equipo, mientras que a largo plazo volver a Primera División, que es donde el club merece estar. En lo individual, quiero estar peleando con los goleadores, porque eso es lo que me lleva a conseguir cosas.
-¿Tuviste chances de salir en este mercado de fichajes?
-Hace poco me llamaron de Santiago Morning. Hubo acercamientos y hablaron entre clubes, pero era solo por seis meses, entonces Melipilla no estaba de acuerdo con eso. Pese a que no se dio, estoy feliz, quiero salir campeón y llevar al club lo más arriba posible.
-¿Cuál ha sido la clave para tener la regularidad que estás teniendo en Melipilla y que no pudiste lograr en otros equipos?
-Yo creo que antes de llegar acá no tuve mucha regularidad porque no me dieron muchas oportunidades. Acá, por ejemplo, me la dieron desde un principio y en la U, donde me formé, no. Si antes hubiera existido la regla Sub-21, quizás hubiera sido diferente, aunque también si hubiese hecho más goles en los pocos partidos que tuve en la U, podría haber cambiado la cosa.
El paso por la U y su abrupta salida
-¿Crees que podrías haber tenido más minutos en la U con la regla del Sub-21?
-Yo creo que sí. Hoy en día hay muchos jugadores que no juegan por rendimiento, sino que por obligación. En otros lados, como en Argentina, no se ve eso. Juegan por lo que muestran en las inferiores, no por una normativa.
-¿Qué tan difícil fue salir de Universidad de Chile?
-Salir de la U fue complicado, pero yo tenía una expectativa que me sirvió para levantar cabeza, que era jugar. Tenía claro que en Universidad de Chile no iba a tener la chance, por lo que no me iba a servir de nada seguir. Si bien pasé momentos difíciles, mi familia siempre me apoyó y me dio las fuerzas para salir adelante y no decaer.
-¿Como recuerdas tu paso por la U?
-De la mejor forma. Yo estuve muchos años ahí y fui muy feliz. Hice muchos goles en juveniles y el club me dio todo para que yo me preocupara de jugar y formarme de la mejor manera para después jugar en Primera División.
-¿Qué tan complicado fue dejar a los azules y partir a otro equipo que seguramente no tenía todo lo que te daba Universidad de Chile?
-Es mucha la diferencia. La U, como es un equipo grande, tiene todo lo necesario para que el futbolista se desarrolle. Sin embargo, esa transición de dejar el club e ir a otro quizás más chico es difícil, porque te tienes que acostumbrar de tener todo a no tener nada. Es ahí donde te das cuenta que falta invertir plata en algunos equipos y sobre todo en el fútbol joven.
-¿Cuál es tú mejor y peor recuerdo en los azules?
-Mi mejor recuerdo fue cuando me llamaron al primer equipo. Fue todo muy sorpresivo porque no venía jugando y de la nada me llaman y me dicen que faltaba un delantero y yo tenía que ocupar esa plaza. El peor cuando me comunican que tengo que irme a préstamo a San Marcos de Arica, porque Ángel Guillermo Hoyos no me consideraba. Fue duro porque venía haciendo goles en la pretemporada y tenía la ilusión de aportar y jugar.
-Años después de tu salida del club entrenaste en el Sifup, pues no encontrabas equipo. ¿Nunca se te pasó por la cabeza dar un paso al costado?
-De chico siempre supe que mi objetivo era ser futbolista, por lo que nunca pensé en hacer otra cosa. Jamás se me ha pasado por la cabeza dejar de jugar. Sabía que todo iba a depender de mí, porque cuesta mantenerse en esto. El fútbol me ha entregado todo y estoy muy agradecido. Siempre he tenido la oportunidad de jugar en buenos equipos, sobre todo en uno tan grande como la U. Para mí, debutar ahí fue lo más lindo.