Si se habla de Damián Muñoz lo primero que se viene a la cabeza es Curicó Unido. El director técnico nacional pasó por las diferentes categorías del club, para finalmente en 2021 asumir la banca del primer equipo del cuadro del Maule.
Su etapa más exitosa en el conjunto Tortero fue en 2022, donde terminó en la tercera posición del Campeonato Nacional, logrando así una histórica clasificación a Copa Libertadores.
Sin embargo, en este 2023 no todo salió como tenía planificado. Por irregulares resultados en la primera parte de la campaña, el DT decidió dar un paso al costado el 22 de mayo. De ahí en más, el nacional no ha vuelto al fútbol, aunque tiene claro que su principal objetivo es hacerlo durante el próximo año.
Y con el objetivo de volver renovado a la profesión y con nuevas herramientas técnicas, el curicano sostuvo un viaje a Argentina que pasó a desmenuzar en diálogo exclusivo con En Cancha.
-¿Cómo va la vida después de su salida de Curicó? ¿A qué se ha dedicado?
-Las primeras semanas aproveché mucho estar con mi familia y desconectarme por un momento del fútbol, ya que fueron años de estar cien por ciento dedicado a la profesión. Pero ya luego de un breve receso, nos juntamos con mi cuerpo técnico a recopilar todo el material de los años que estuvimos en Curicó Unido, a realizar análisis de lo bueno y de lo malo y a sacar conclusiones que nos puedan servir para el futuro. Vimos también mucho fútbol y nos interiorizamos de todo el balompié chileno, no solo de la Primera División, sino que también de la Primera B. Fue un tiempo muy provechoso.
-Hace poco estuvo en Argentina con su cuerpo técnico. ¿Cuáles fueron los motivos del viaje?
-Hace tiempo que con mi cuerpo técnico teníamos ganas de ir a ese país, porque sabemos que se trabaja muy bien; desde las divisiones inferiores hasta el primer equipo. Son potencias mundiales y nos sirvió mucho para tener experiencias con técnicos y adquirir nuevas herramientas.
-¿Qué equipos visitó y con qué cuerpos técnicos tuvo la oportunidad de charlar?
-Nuestra primera parada fue en Córdoba. Allí visitamos Talleres, Instituto y Belgrano. Después pasamos por Buenos Aires, donde aprovechamos de visitar Lanús, Vélez Sarsfield y Boca Juniors, para finalmente juntarnos con Gabriel Sanguinetti, extécnico de Newell´s Old Boys y Martín Palermo, quien ahora dirige en Platense.
-En esos equipos hay varios chilenos. ¿Tuvo la posibilidad de compartir con alguno?
-En Huracán conversé mucho con Rodrigo Echeverría, con quien hace tiempo nos conocemos ya que varias veces lo quise llevar a Curicó. Hablé con él y gracias a eso pude llegar ahí, donde sostuve charlas con Diego Martínez, DT del club.
-¿Qué conclusiones saca de su paso por Argentina?
-Nos encontramos con una grata sorpresa del trabajo que realizan, le dan mucha importancia al fútbol formativo, casi todos los clubes tienen complejos grandes y con muchas herramientas para el futbolista. Es otro mundo, donde se puede realizar tranquilamente el trabajo. Desde lo técnico, adquirimos experiencias y conocimientos de gente que tiene recorrido en esto. Saber cómo se manejan los planteles y cómo resuelven situaciones que se viven en el día a día. Fue muy enriquecedor. Nos volvimos a insertar en la actividad para preparar lo que se viene.
-¿Hay mucha diferencia con el fútbol chileno?
-En la infraestructura, en la dinámica de los entrenamientos y partidos, sí, hay mucha. Fuimos a ver varios partidos y es una diferencia marcada, donde no hay pausas y se corre todo el partido. Es un fútbol bien físico.
Los planes de Muñoz para 2024 y su última etapa en Curicó Unido
-¿Cuáles son sus planes para la próxima temporada?
-Lo ideal es tener una posibilidad en Primera División, pero no nos cerramos a Primera B. Será importante el proyecto que tenga el club y las intenciones de ellos que podamos trabajar tranquilamente. Que nos quieran y que valoren lo que hicimos en Curicó, sobre todo en 2022. Estamos trabajando de la mejor manera posible para mejorar.
-¿Le ha servido este tiempo fuera del fútbol? ¿Qué saca en limpio?
-Como cuerpo técnico nos autoanalizamos bastante y tratamos, primero que todo, ver lo que hicimos mal. Sacamos lecciones de los tres periodos y hemos ido reforzando ideas y mejorando otras, pero siempre manteniendo el sello de ser protagonistas, tener el control de juego y llegar con varios jugadores en ofensiva.
-¿Qué hizo bien y en qué quedó al debe en su paso por Curicó?
-Lo que hicimos bien es la relación que teníamos con los jugadores, éramos muy cercanos. Entendíamos que el futbolista es persona y que puede tener días buenos y malos. En las temporadas que estuvimos fue una de las principales fortalezas, la unión de grupo. Las cosas por mejorar quizás tienen que ver más en temas de partido, situaciones que quizás pudimos manejar mejor. Nunca nos cerramos y siempre buscamos la solución para mejorar, sobre todo, la última etapa.
-¿Su salida del club se debió principalmente por los resultados o hubo algo más?
-Salimos principalmente porque queríamos hacer cosas que el club no estaba de acuerdo. Para nosotros era alargar la agonía, porque si no podíamos traer refuerzos, si no se nos autorizaba a realizar cambios al término de la primera rueda, era seguir en lo mismo. Necesitábamos cambios y como no fue posible, decidimos salir.
-Si bien pudo mantener gran parte del plantel 2022, para esta temporada sufrió la sensible baja de Rodrigo Holgado. ¿Fue algo clave en la baja del equipo?
-Una de las cosas que pedimos y que no se pudo hacer, era que Rodrigo se quedara. Sabíamos de su calidad y cuando se fue, no pudimos traer a alguien con sus características. Teníamos visto a otros jugadores y que podían haber hecho algo similar. Vinieron jugadores que son buenos pero para otra idea de juego. Nos costó mucho que se ensamblaran a lo que queríamos.
-¿Qué nombres pidió para reemplazar a Holgado?
-Vimos muchos nombres. Estaba Nicolás Guerra, pero principalmente Sebastián Sáez. Era un jugador que lo estudiamos mucho y que técnicamente es muy bueno, erra muy pocos pases y juega bien con los volantes. También estaba en carpeta Lucas Passerini, quien es alguien que te atrae mucha marca. Habían varios.
-Hoy Curicó está último en el Campeonato Nacional y tendría que pasar un milagro para que se salve del descenso...
-Es una situación compleja. Los directivos quizás pensaron que con la salida nuestra los jugadores iban a tener un mejor rendimiento, pero lamentablemente no se ha dado así. Los resultados no se han dado con el nuevo cuerpo técnico y pese a que nosotros dejamos al equipo en la parte baja, estábamos a seis puntos de torneos internacionales. Es lamentable la situación porque uno como hincha quiere que le vaya bien siempre, pero hay que confiar en los chicos que sacarán la situación adelante.