Es insólita la situación que vive Maximiliano Velazco en Cobreloa. El arquero fue titular indiscutido y hasta algunos partidos capitán durante dos temporadas. A fines del año pasado, el club le compró la mitad del pase en 200 mil dólares a River Plate, pero mientras estaba de vacaciones, se enteró "por la prensa" que no entraba en los planes del club, pese a tener contrato hasta diciembre de 2024.
En declaraciones exclusivas a En Cancha, el argentino de 26 años contó el calvario que le tocó vivir. "Pasé un mes y medio complicado. Sufrí y también mucho mi familia. Imagínate que yo tengo a mis dos hijos anotados hasta en un colegio en Calama y pasa esto, sin tener una explicación directa".
La explicación directa a la que hace alusión son los dichos de Fernando Ramírez, presidente de Cobreloa, quien en una nota al diario El Mercurio de Calama afirmó: "Tuvimos que pagar por un arquero al que hoy no quiere nadie".
En la actualidad, Velazco se entrena con el equipo, pero el entrenador Emiliano Astorga no lo tiene en cuenta: "Me dijo que los dirigentes le manifestaron que no contara conmigo y por eso trajo a otro arquero de nivel (Matías Cano). Yo le pedí que me dé una mínima chance, pero están todos muy cerrados. En las prácticas, ni siquiera participo de los reducidos ni hago fútbol".
Con un tono tranquilo, Velazco marca su enojo con el presidente: "Lo que hizo fue una falta de respeto. Si no querían contar conmigo, me lo decían y listo. Hay que ser directo y buena persona. Quise hablar con él y no tuve respuestas. A veces no contesta o, como me ocurrió hace unos días, le mandé un mensaje y me respondió que no estaba en la ciudad".
Lo llamativo, siempre de acuerdo a lo relatado por el arquero, es que tampoco hubo intenciones de darlo a otro equipo: "Aparecieron clubes como Unión Española, O'Higgins, Palestino, Iquique y uno de Paraguay. Pero se fueron cayendo porque no lo atendían a mi representante".
Velazco, que siente que "saldrá fortalecido de esta situación", está "agradecido con los hinchas de Cobreloa que me hacen sentir su apoyo" y, si bien no sabe si seguirá en otro equipo (pocos mercados tienen sus registros de transferencias abiertos), cerró: "Me cuesta entender la postura de la institución. No sé si el presidente me atenderá, espero poder cruzarlo en el club para saber cómo seguimos. Ellos se manejaron mal porque compraron a un arquero y ahora no lo tienen en cuenta. Es difícil de entender".