Carlos Bueno, ex delantero del fútbol uruguayo, dejó la actividad el 2020, luego de haber anotado 198 goles en toda su carrera, algunos de ellos en canchas chilenas, y por dos de los equipos más grandes del país: la Universidad de Chile y la Universidad Católica.
A los azules llegó el año 2010, y alcanzó a jugar 21 partidos, anotando en 8 oportunidades. Volvió el 2013 para cruzar la vereda y vestirse de "Cruzado", disputando 12 compromisos y rompiendo las redes en 5 ocasiones.
"Tengo sólo recuerdos lindos, hice muy buenas amistadas. Jugué en dos clubes muy importantes, que contaban con una infraestructura muy buena, muy linda. Me hicieron sentir cómodo siempre", le cuenta a En Cancha desde Uruguay.
Llegaste el 2010 a la U procedente de la Real Sociedad. ¿Cómo recuerdas ese paso?
Sí, muy lindo todo. En la U de Chile fui muy feliz, la verdad. Me gustó mucho el trato de la gente y de mis compañeros, pese a que estuve muy poco. Pero fue un semestre muy bueno, me atendieron de la mejor manera. Me fui contento por haber estado en un equipo tan grande.
Volviste el 2013, pero ahora a la Universidad Católica, uno de los archirrivales. ¿La presión es similar?
La U y la UC son clubes muy diferentes. La U tiene mucha más gente, y si bien en ambos clubes el objetivo es salir campeón todos los años, en la U se siente mucho más presión que en la Católica. Eso se nota, sobre todo en el estadio cuando te va a alentar muchísima gente.
"Si el fútbol chileno quiere ganar algo, tiene que invertir"
Esa UC no se comparaba a la de hoy, que es el actual tricampeón del fútbol chileno.
Los resultados en esa Católica no se daban como se dan hoy, es verdad. Deportivamente han cambiado muchísimo, tienen muy buenos jugadores, han hechos torneos perfectos, han ganado campeonatos... Cuando llegué yo no venían bien, había un par de problemas, pero disfruté mucho esos seis meses que estuvimos ahí con mi familia.
Jugaste en dos grandes de nuestro fútbol y viviste en carne propia lo difícil que es para Chile llegar a instancias finales de torneos internacionales, algo que mantiene hasta hoy. ¿Por qué crees que pasa eso?
El nivel económico en el fútbol hoy es lo que manda, y si ves el mercado brasileño y el argentino, es difícil competir. A Chile le falta eso, el gramo para el kilo, esa inversión por jugadores ganadores. Mira a Brasil, que trajeron a Diego Costa, y no por dos pesos. Él puede estar en Europa perfectamente, pero invierten en él para que al Atlético Mineiro le deje una Copa Libertadores o una Sudamericana. Nosotros metimos a Peñarol en instancias finales ahora, pero sin mucha inversión, más con jugadores de la cantera. Pero estoy convencido que si el fútbol chileno quiere ganar algo, tiene que invertir. Levantar una copa internacional tarde o temprano se dará si pone dinero en ello.