Sebastián Núñez (39) se encuentra en Concón, relajado, descansando un poco de la montaña rusa que significa el fútbol. El DT chileno, exadiestrador del Always Ready de Bolivia, salió del club altiplánico cuando nadie se lo esperaba.
Lo que causó sorpresa fue que dejó al equipo cuando se encontraba ad portas de debutar en la Copa Libertadores, torneo atractivo para cualquier entrenador, sobre todo para uno que intenta abrirse camino en el exigente campo los directores técnicos en Sudamérica.
Núñez, que inició su carrera de técnico en las divisiones inferiores de Santiago Wanderers en el 2008, fue asistente en el Huehueteco de Guatemala antes de arribar a Bolivia. Allí sumó experiencias en clubes como el Bolívar (ayudante técnico), el Nacional de Potosí y el ya mencionado Always Ready, que hoy día le pelea el Grupo B de la Libertadores al Inter de Porto Alegre de Carlos Palacios, a Olimpia y el Deportivo Táchira.
El entrenador nacional habló con En Cancha y detalló por qué se alejó del club boliviano, además de confesar que tiene la ilusión de iniciar carrera en el fútbol chileno.
-¿Qué pasó? ¿Por qué tu paso por el Always Ready llegó a su fin?
-Hubo algunos problemas con algunos dirigentes del club, y por mutuo acuerdo decidimos dejarlo hasta ahí.
-¿Problemas de qué tipo?
-Se trató de imponer algunos jugadores en el equipo que nosotros como cuerpo técnico no pedimos, y por ética preferimos no seguir en el club, pese a que se venían haciendo bien las cosas a nivel deportivo, con buenos resultados. Creo que era lo mejor.
-Se estila mucho eso en el fútbol de hoy, dirigentes metiéndose más en el armado del equipo...
-No podría decir cómo era antes, porque soy un entrenador muy joven, pero a mí es primera vez que me pasa y la verdad que prefiero que me toque ahora, porque me queda de experiencia para el futuro. Al final, son cosas que te sirven para los siguientes desafíos y me quedo con los buenos momentos.
-Asumiste a principios de año en el Always Ready, ¿te quedaste con las ganas de dirigir en la Copa Libertadores?
-Sí, teníamos un lindo desafío en esa materia. Lamentablemente, mi salida se dio antes del debut y nos quedó esa espina. Justamente habíamos tenido una muy buena preparación para aquel torneo, haciendo una gira en Brasil, jugando ante el Santos y el Palmeiras, y las expectativas eran buenas. No se pudo dar.
"Trabajaré para ganarme mi espacio"
-En general miramos en menos el fútbol boliviano, pero el fútbol chileno tampoco logra destacar en Sudamérica. ¿Cómo es? ¿Es similar al de acá?
-Sí, yo diría que son muy parecidos. Pasa que el fútbol boliviano es muy interesante por su geografía, juegas en alturas y ambientes diferentes cada fin de semana. Si bien no está el nivel de inversión que se hace en Chile, y uno se acostumbra a trabajar con la infraestructura que hay, es competitivo igual y lo demuestran haciéndose fuertes de local en las competencias internacionales.
-Sacas cuentas positivas, entonces...
-Sí, de todos modos. Es muy sacrificado, pero sirve de experiencia. Obviamente, no tiene todas las comodidades que te pueden ofrecer otras ligas, pero sí se puede hacer un buen trabajo con lo que hay.
-¿Y cómo ves el fútbol chileno desde afuera? ¿Por qué nos cuesta tanto competir de igual a igual con nuestros vecinos en la región?
-Nos ha pasado un poco eso de mirar sobre el hombro a otros rivales, y no solo de Bolivia sino que de otros países también, y con el tiempo nos hemos dado cuenta que no somos tan competitivos como creemos. Las otras ligas también se preparan y tienen clubes que, pese a no tener grandes presupuestos, si tienen un proyecto claro y sacan ventaja de sus fortalezas. Hoy todo está mas parejo y el fútbol chileno se ha ido quedando.
-¿Te ilusionas con dirigir en el fútbol chileno?
-Sí, lógico. De hecho, esa es la idea. Hoy me encuentro descansando, saliendo un poco de la vorágine del fútbol, pero la intención es volver a dirigir en Chile. Tuvimos opción de otro equipo en Bolivia pero preferimos no aceptarla, entendiendo que como cuerpo técnico cumplimos un ciclo allá. Si no es en Chile, esperamos estar pronto dirigiendo en otra liga sudamericana.
-Aunque suene rara la pregunta, ¿te juega en contra ser chileno? Digo, porque muchas veces los dirigentes prefieren entrenadores extranjeros aunque no tengan el currículum necesario.
-No lo sé. Es cierto que muchas veces los dirigentes nacionales optan por los técnicos extranjeros, pero yo tengo asumido que son las reglas del juego. Trabajaré día a día para ganarme mi espacio y tener una opción para dirigir. Con el tiempo, en todo caso, los directivos chilenos se han dado cuenta que los entrenadores nacionales también nos capacitamos y estamos constantemente actualizando y renovando conocimientos. Veremos qué pasa.
