La vida por sí sola ya tiene una carga de estrés que no es menor. El trabajo, la rutina y el poco tiempo libre puede llevarnos a estados de incertidumbre en donde es difícil tener claridad de los hechos. Si a esto le sumamos deudas y morosidad pues, de seguro te haces una idea de lo complejo que puede volverse el panorama. Como no queremos que a nadie le ocurra esto, te dejamos algunos datos y sugerencias que harán tu realidad económica más liviana y lo mejor, te mantendrán lejos de los acreedores.
DICOM, de la empresa Equifax, es el registro de deudas y antecedentes comerciales en Chile, el que puede tener un impacto significativo en la vida financiera de las personas. Evitar caer en este registro o salir de él, puede ser un desafío, pero existen estrategias que pueden ayudar a mantener una salud financiera sólida y evitar problemas relacionados con la morosidad.
La morosidad en Chile ha sido un desafío persistente, y el 40º Informe de Deuda Morosa, realizado por la Universidad San Sebastián y Equifax, revela que, a marzo de 2023, aproximadamente 4 millones 150 mil personas mantienen deudas impagas en el país, con un promedio de casi dos millones de pesos chilenos ($1.996.867).
La fluctuación en el número de morosos a lo largo de los años se debe a factores como la aplicación de la Ley DICOM o el “borronazo”, que eliminó a quienes tenían deudas menores a 2,5 millones de pesos y estaban en mora en 2012. Sin embargo, a partir de esa fecha, la lista volvió a aumentar. Las principales deudas que se acumulan están relacionadas con el retail y la banca, y las tasas de interés han aumentado significativamente en los últimos años.
Ahora bien, salir de DICOM generalmente implica pagar la deuda y obtener un certificado que indique que no hay pagos pendientes. Sin embargo, para muchas personas, esta no siempre es una opción a corto plazo. Otras opciones incluyen la repactación, la quiebra y liquidación, la consolidación de deudas, la prescripción y buscar asesoría financiera.
A continuación, te ofrecemos consejos detallados sobre cómo evitar caer en esta situación y mantener un buen historial crediticio:
1. Evalúa tu situación financiera:
- Realiza una revisión exhaustiva de tus ingresos, gastos y deudas actuales.
- Comprende cuánto y a quién le debes. Esto te permitirá tener una visión clara de tu situación financiera y tomar decisiones informadas.
2. Elabora un presupuesto detallado:
- Controla tus gastos y asegúrate de gastar menos de lo que ganas.
- Prioriza tus necesidades esenciales y evita gastos innecesarios.
3. Contacta a tus acreedores:
- Si enfrentas dificultades para pagar tus deudas, explica tu situación a los acreedores.
- Algunas entidades pueden estar dispuestas a negociar plazos de pago o acuerdos de repactación.
4. Jerarquiza y prioriza las deudas:
- Si tienes varias deudas pendientes, prioriza aquellas con tasas de interés más altas o que puedan generar consecuencias más graves en caso de morosidad.
5. Evita Tomar más deudas:
- No solicites nuevos créditos o préstamos mientras atraviesas dificultades financieras.
- Evita hacer una “bicicleta financiera,” tomando nuevas deudas para pagar las anteriores.
6. Ahorra y genera un fondo de emergencia:
- Destina una parte de tus ingresos a un fondo de emergencia, siempre que sea posible.
- Contar con ahorros te ayudará a afrontar situaciones inesperadas sin recurrir a deudas adicionales.
7. Educación financiera:
- Aprende sobre finanzas personales y toma decisiones financieras informadas.
- Entiende las dimensiones de los compromisos que tomas y sus costos financieros.
¿Todas las deudas van a Equifax?
Pese a que da la idea de que no hay como salvarse de esto, no todas las deudas te llevan a las planillas de la empresa. Entonces, ¿Cuáles no deberían aparecer en el informe?
- Deudas de servicios básicos: la morosidad relacionada al pago de electricidad, agua, gas, teléfono fijo y saneamiento básico, entre otros, no se reportan.
- Deudas universitarias: Al igual que con los servicios básicos, la ley impide que DICOM reporte la morosidad asociada al no pago a instituciones educativas, como universidades o institutos.
- Deudas menores: Existen ciertos montos que las empresas dejan pasar y consideran que no requieren ser derivados a la compañía. Aún así, estos criterios son de carácter privado y solo son conocidos por las empresas y sus departamentos de cobranza.
Mantener un buen historial crediticio es esencial para evitar problemas con DICOM. La planificación económica, el control de gastos y la comunicación abierta con los acreedores pueden ser herramientas efectivas para mantener un historial limpio y sólido. La educación es fundamental para entender los riesgos financieros y tomar decisiones inteligentes.
Recuerda que tu situación con las finanzas puede cambiar con el tiempo, y es importante estar preparado para afrontar desafíos económicos de manera efectiva.