La pandemia del Covid-19 provocó que empresas de diferentes rubros se vieran afectadas negativamente, teniendo que recurrir a reorganizaciones de sus finanzas y activos para evitar la quiebra, sin embargo, una de estas está siendo acusada por estafa.
Se trata de una compañía ubicada en la Región de O´Higgins ligada al rubro de la agricultura, la cual cuenta con al menos 17 denuncias interpuestas en la Policía de Investigaciones por agricultores, y una querella presentada por una entidad china.
Acusan a importante firma chilena de estafa
Se trata de Olivar Export, la cual, según informa el Diario Financiero, en noviembre de 2024 recurrió a la justicia para solicitar su reorganización, pero que está siendo acusada por el no pago de deudas por empresas chinas, bancos, agricultores, entre otros.
La querella en contra de esta fue realizada por Shanghai Yuhua Fruits en agosto de 2024, donde se le acusa que durante 2023 celebraron un contrato que obligaba a Olivar Export a entregar 15 contenedores de cerezas, mientras que la firma china tenía que pagar $828.00 dólares en cuatro cuotas.
Sin embargo, solo fue entregado un container, a pesar de que se alcanzaron a realizar el pago de tres cuotas. “El negocio originalmente pactado sería una simple estafa y/o apropiación indebida, no existiendo por parte de dicha empresa ninguna intención de cumplir con la compraventa desde el primer momento”.
Junto con esto, Shanghai Yuhua Fruits se contactó con 11 compañías chinas del rubro que tenían negocios con Olivar Export, quienes señalaron que poseían el mismo o similar problema con la entidad.
Además, la fruta que la empresa tenía que entregar se adquiría de pequeños y medianos agricultores, no obstante, la compañía nunca les pagó por la mercancía.
¿Qué dijo Olivar Export sobre esta situación?
Al ser consultada sobre esto, desde Olivar Export comenzaron a DF que nunca había tenido algún problema, hasta que en 2023 existió una baja de la cereza, “lo que llevó a bajar el volumen esperado por parte de la producción local, lo que impidió que pudiésemos cumplir con la cantidad acordada”.
Agregando que “jamás pensamos que podríamos encontrarnos en esta situación. La baja en la producción de cerezas fue tan grande, que el golpe fue por todos lados. Nunca fue un incumplimiento intencional, ni menos algo que pudiese estar bajo nuestra voluntad”.
Por su parte, la abogada defensora y socia de Barruel Borzutzky abogados, Susana Borzutzky, indicó que no hay una intención ni modus operandi defraudatorio, pero sí hay deudas que se están intentando pagar a través de su plan de reorganización.
