Era el año 2019, y una importante denuncia por libre competencia involucraba a dos de los holdings de casinos más grandes en Chile. Esto, a raíz de que Enjoy en 2017 se adjudicó la licitación de los casinos de juegos en las ciudades de Puerto Varas, que pertenecía a la competencia, y Pucón. A partir de ello, su rival, Sun Dreams, habría realizado estrategias para judicializar el proceso, entorpeciendo así la construcción de las salas de juego.
Cinco años después, el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) resolvió rechazar la demanda interpuesta por Enjoy en contra de Sun Dreams. En el reclamo, se acusaba de “un cúmulo organizado, reiterado y sistemático de acciones judiciales, administrativas y de facto, dirigidas a arrebatar a la compañía los permisos que legítimamente se adjudicó y, alternativamente, a incrementar la incertidumbre jurídica y de negocios que la afecta y sus costos, hasta hacer inviable su operación”.
¿Qué dijo el ente regulador sobre la resolución?
Según indica el Diario Financiero, el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia manifestó que “no se configuran los ilícitos alegados por Enjoy en su demanda”, agregando que, “según se ha analizado, las acciones que dieron lugar a los procesos administrativos y judiciales que Enjoy ha acusado como desleales, no carecían objetivamente de mérito”.
Desde Sun Dreams, se defendieron negando que existiera una multiplicidad de acciones y que los proyectos habían fracasado por otras razones ajenas a su responsabilidad.
Así mismo, la sentencia destacó que “no se aportó prueba que permitiera establecer una relación causal directa entre las acciones de Sun Dreams y la imposibilidad de desarrollar los proyectos de las demandantes. Ante todo, ninguno de los recursos judiciales impedía el desarrollo de los proyectos, toda vez que no suponían la suspensión de los efectos de la adjudicación. Adicionalmente, no se acreditó que los permisos administrativos requeridos por Enjoy se hubieran retrasado a causa de la intervención de Sun Dreams”.