Según un informe realizado en 2024 por la Subsecretaría del Trabajo, en Chile hay más de nueve millones de empleados, ya sean públicos o privados. De estos, algunos se desempeñan de forma presencial y otros de manera híbrida. No obstante, hay algo que la mayoría de los chilenos tienen en común: malos hábitos a la hora de trabajar.
Por su parte, Mutual de Seguridad publicó los resultados de su Encuesta de Hábitos Saludables, la que recogió las percepciones y prácticas de más de 2.300 personas en relación a su salud física y mental en jornadas laborales.
Estas son los peores hábitos que afectan a los trabajadores chilenos
El sondeo reveló patrones preocupantes en cuanto a la automedicación, el consumo de bebidas energéticas, y la calidad del sueño. Por ejemplo, un 73% de los trabajadores menores de 25 años tienden a automedicarse con mayor frecuencia, lo que contrasta con el 57% de los mayores de 26 que también lo hace.
También, el 23% de los jóvenes reporta consumir líquidos energizantes regularmente por sobre el resto de los encuestados, siendo las personas entre 26 y 35 años quienes le siguen.
Por otra parte y considerando a todos los encuestados, el 60% declaró dormir menos de siete horas diarias, y de este grupo, el 50% fuma o ha fumado en algún momento, sugiriendo una alta prevalencia de problemas de sueño. Esta situación podría estar afectando el rendimiento y la salud general de los trabajadores, especialmente en sectores donde las largas jornadas o el estrés laboral son comunes.
Variaciones según edad, género y modalidad de trabajo
El documento también ofrece diferencias en los hábitos según el grupo etario, el género y la modalidad de trabajo de cada encuestado. En tanto, las personas jóvenes muestran mayor interés en mejorar su actividad física y alimentación, mientras que los adultos mayores tienden a mantenerse en sus rutinas actuales. Además, las mujeres reportan una mayor preocupación por las consecuencias de alejarse de hábitos saludables (63,1%) frente a los hombres (31,9%).
Las modalidades de trabajo también juegan un rol crucial, aquellos que trabajan de manera mixta o remota presentan mayores niveles de consumo de bebidas energéticas y alcohol, y pasan más tiempo sentados en comparación con los trabajadores presenciales. Un 34% de los trabajadores remotos consume bebidas energéticas regularmente, mientras que solo el 13% de los presenciales lo hace.